El presente de Unión ilusiona a sus hinchas. Quizás, porque la mayoría no pensaba que se podía arrancar así en la Superliga, peleando bien arriba y siendo el único escolta de Boca, que sacó amplias diferencias en estas primera ocho fechas. Más que nada, porque hay un cambio radical futbolístico y anímico después de haber culminado el torneo anterior con muchas dudas y sin entrenador.

En este sentido, el arribo de Leonardo Madelón fue clave. Su espalda absorbió toda la presión y el grupo, en silencio, fue creciendo y fortaleciéndose. Es así como es una de las relevaciones y se anima a ser protagonista en cada cancha. La victoria ante Vélez demostró la personalidad que tiene y la derrota ante Lanús parece ser un lunar tenue en esta campaña. Encima, vale destacar que tiene tres lesionados que serían titulares (Nereo Fernández, Emanuel Britez y Claudio Aquino), pero los refuerzos hicieron valer hasta el momento su denominación, ya que cumplieron con creces.

Así se construye este Tate, que este lunes tuvo día libre y que encarará este semana con suma tranquilidad sabiendo que no habrá actividad oficial por 15 días por una nueva fecha FIFA. Será un pasaje fundamental para tratar de poner a punto aquellos futbolistas que no pueden estar a la par y para seguir afianzando la idea. Los técnico siempre son de no parar con el fin de aceitar un poco más todo, pero el calendario en este caso atenta con eso.

Habrá que ver también como evoluciona Bruno Pittón, quien salió con un golpe contra el Fortín, aunque todo indicaría que sería cuestión de días nada más. Tiempo de análisis, de más trabajo y humildad para este Unión de Madelón que quiere animarse a más.