El tribunal Electoral de la Provincia de Santa Fe difundió la lista de los Diputados electos según el escrutinio provisorio. La distribución que hizo el Tribunal Electoral fue 28 para el Frente Santa Fe Para Todos, 15 para el Frente Progresista y 7 para Unión PRO Federal.

Para lograr una banca en la Cámara de Diputados de la provincia de Santa Fe, Carlos Del Frade debería haber obtenido el 3% de los votos del padrón. El candidato de Proyecto Sur logró el 3,59% de los votos emitidos, no del padrón.

La confusión se generó por las diferencias que hay entre la ley que rige las primarias y la norma que rige la elección general. Para confeccionar las listas de candidatos luego de las primarias, se tiene que tener el 3% de los votos emitidos. Ahora, en la elección general rige la ley 9280. Esta norma establece que no participarán en la distribución de cargo las listas que no logren un 3% del padrón electoral.

En diálogo con LT10, Domingo Rondina, abogado constitucionalista, expresó que “es una situación compleja donde hay que interpretar las normas que están en juego. A esto lo debe resolver el tribunal electoral y la Corte Suprema de la provincia. Yo considero que el acceso al reparto de bancas debe establecerse sobre el 3% de los votos válidamente emitidos y no sobre el 3% del padrón. Yo creo que la 9280 ya no tiene vigencia porque es incompatible con el régimen nuevo”.

Además, Domingo Rondina agregó que “la 9280 establece un régimen filosóficamente, constitucionalmente e ideológicamente contrario a los principios democráticos. Se deberían tomar en cuenta los votos válidamente admitidos. Hay una derogación tácita de la ley 9280”.

Por su parte, Carlos Del Frade, manifestó por LT10 que “el Tribunal tiene que respetar la voluntad popular y el pluralismo ideológico. Las 59.924 personas que nos votaron merecen ser respetados porque tenemos más sufragios que 9 legisladores que están ingresando en lugar nuestro. Esto es una estafa a la voluntad popular”.

En este sentido, Carlos Del Frade subrayó que “lo más preocupante es que algunos funcionarios del gobierno se terminan convirtiendo en voceros del PRO. Yo lo digo por Superti y por Bonfatti. Hay algo que hace que la banca de Proyecto Sur sea repudiada por varios integrantes de distintas fuerzas políticas”.