“San Justo es una ciudad tranquila”, asegura Mauricio Zanutigh, hijo del empresario ganadero Roque Zanutigh, asesinado de nueve puñaladas el 25 de enero de 2016 en su casa en pleno centro de la ciudad de San Justo. Esa misma ciudad tranquila ayer decidió marchar para reclamar el accionar de la justicia y dilucidar qué sucedió aquel día.

Más de 500 fojas tenía el expediente de la policía sobre el crimen, ningún detenido en torno al hecho que generó un fuerte impacto en toda la comunidad sanjustina.

“Hace dos años perdimos a nuestro viejo, en pleno centro, entraron a su casa, le dieron nueve puñaladas, y lo escondieron debajo de dos camas de una plaza donde dormía”, recordó Zanutigh en diálogo con el programa El Cuarto Poder.

En ese sentido, rescató la labor realizada por la policía de San Justo en el momento del asesinato, especialmente en la recolección de elementos que pudieran servir de prueba para lo que luego sería la investigación judicial.

Sin embargo, el hijo de la víctima puso reparos en el Poder Judicial, al cual la policía le entregó un expediente de más de 500 fojas, pero los avances parecerían ser escasos.

“Son ellos quienes tenían que decir si encontraban algo, y ahí quedó. No sabemos si sirvió o no, y si siguieron investigando o si decidieron imputar a alguien en base a la investigación”, se lamentó.

Zanutigh no tiene dudas de que “la causa está dormida” y dijo sentir “impotencia por la impunidad que tienen los delincuentes” para poder matar a sangre fría en una casa en pleno centro y continuar su vida sin ser descubiertos.