La próxima versión de Chrome, que en números sería la versión 66, incluirá una novedad que agradará a muchísimos usuarios: el navegador bloqueará cualquier vídeo que se reproduzca con sonido y automáticamente, sea un anuncio, un vídeo de la web que has abierto o lo que sea.

Chrome sólo los reproducirá automáticamente si el sonido no lo hace a la vez, o si el usuario pulsa sobre el vídeo para activar el sonido, como viene siendo lo habitual en la mayoría de páginas de Internet.

Este movimiento encaja con lo que Chrome ha hecho recientemente con la publicidad. Tras la actualización de principios de año, el navegador de Google bloquea sin necesidad de una extensión de terceros la publicidad más molesta.

Del mismo modo, en las actualizaciones anteriores, han introducido opciones para silenciar pestañas, para silenciar webs por completo y para bloquear las notificaciones tan molestas que solicitan mandar algunas de ellas.

No está claro si el objetivo de Google con estas mejoras es conseguir una mayor satisfacción entre los usuarios que usan el navegador (que ya son la mayoría en móviles y en ordenadores de escritorio) o si también buscan acabar con la publicidad que puede hacerles la competencia.

Pese a ser conocida por sus servicios, Google ingresa dinero de forma mayoritaria a través de sus programas publicitarios, que comparten con medios de comunicación y páginas webs de todo el mundo. En 2017, ingresaron más de 73.800 millones netos en venta de anuncios.