Los motivos que habrían llevado a la barra a suspender el partido
Andrés Merlos decidió terminar el partido en el Brigadier López una vez que cayera en el campo de juego la tercera bomba de estruendo. Se trataría de una protesta de la barra sabalera.
Andrés Merlos dijo basta a los 22 minutos del primer tiempo, cuando una nueva bomba de estruendo cayó en el arco defendido por César Rigamonti, quien ya había quedado sentido en una detonación anterior. En esta oportunidad no solamente el arquero quedó sentido, sino que también Marcelo Estigarribia, volante de Colón, se mostró confundido y molesto por la explosión.
Fue la gota que rebalsó el vaso, por lo cual el árbitro explicó su decisión a la prensa ("falta de garantías), debido a que en la detonación anterior había hecho una muestra clara que si la barra arrojaba una nueva bomba al campo de juego suspendería el cotejo.
Nadie oficializó los motivos que llevaron a un grupo de barras a tomar la decisión de arrojar bombas al campo de juego, aunque se especula que tiene que ver con una protesta debido a que pidieron dinero para viajar al Mundial y que el mismo les fue denegado.
Vale recordar que la barra también le pidió a los jugadores y a los dirigentes dinero para viajar a Venezuela, cuando Colón jugó frente a Zamora por el partido de ida de la primera fase de la Copa Sudamericana. En aquella oportunidad intervino la seguridad de la provincia, que custodió los entrenamientos y algunos domicilios particulares de dirigentes y jugadores.
Incluso se pudo observar un par de banderas dadas vueltas, en clara muestra de protesta contra el pedido que les habría sido denegado. Una vez que el árbitro suspendió el partido, gran parte de los hinchas que estuvieron en el Brigadier López cantaron en protesta del grupo que decidió que el juego no debía continuar.