Despidieron a Marcelo Álvarez

El exintendente fue velado en una sala del centro y trasladado al Cementerio Municipal. Falleció ayer en el Hospital Cullen producto de un infarto agudo de miocardio.

Esta mañana, los restos del exintendente Marcelo Álvarez fueron velados en la sala velatoria ubicada en Suipacha y 25 de mayo, y a las 10.40 el cortejo fúnebre partió hacia el Cementerio Municipal donde se le dio la última despedida. 

Álvarez ingresó ayer caminando a la guardia de un sanatorio privado en horas del mediodía y después el cuadro comenzó a agravarse por lo que fue trasladado al hospital J.M. Cullen, donde terminó falleciendo.

Durante la mañana, su exsecretario privado y amigo personal, Rodolfo Caminos, se acercó a la sala velatoria y dialogó con LT10: "Estaba bien, nunca tuvo un aviso de una afección cardíaca", contó, al mismo tiempo que dijo que Álvarez tenía "muchos proyectos en su profesión y se lo veía muy bien".

Sobre la causa por la inundación de 2003, mientras era máximo mandatario de la ciudad, Caminos expresó que Álvarez tuvo "una exposición brutal" en ese momento, y destacó que el sometimiento a una causa judicial de la que no era responsable "lo tuvo mal".

 

Las últimas horas del exintendente:

El director del hospital Cullen, Juan Pablo Poletti, explicó a LT10 que "en la siesta (de ayer), aproximadamente 13.30, recibo el llamado del jefe de Terapia Intensiva que había recibido una comunicación de un sanatorio privado. No sabíamos quién era el paciente".

"Lo trajeron al Cullen porque contamos con una máquina de ECMO. Luego nos enteramos que se trataba del exintendente", agregó.

Álvarez fue conectado a esta máquina, que permite oxigenar la sangre para que pueda descansar el mústulo miocárdico. Pero a las tres horas terminó falleciendo.

Cuando Álvarez dijo: "a mí me cargaron una mochila"

Marcelo Álvarez fue intendente de Santa Fe desde el 10 de diciembre de 1999 hasta 2003. Durante su mandato la ciudad vivió la inundación del 29 de abril de 2003, una de las catástrofes hídricas más trágicas de Santa Fe.

A Marcelo Álvarez le tocó gobernar la ciudad en momentos críticos. En primer lugar, porque sobre finales del año 2000 y hasta mediados de 2002 el país atravesó la crisis económica más profunda de su historia moderna.

Y cuando la situación comenzaba a mejorar, una crecida extraordinaria del río Salado dejó un tercio de la ciudad de Santa Fe bajo agua, con más de 120 mil personas evacuadas y autoevacuadas, más de 20 muertos directos y un número nunca determinado de fallecimientos indirectos a causa de aquel estrago.

Durante aquella emergencia, el gobierno provincial no actuó a su debido tiempo para prevenir esta catástrofe. Nunca de dio el alerta desde la Provincia para que el cordón oeste de la ciudad de Santa Fe fuera evacuado. Pero fue Alvarez quien públicamente dijo que esa zona no se inundaría.

Álvarez fue procesado en la causa inundación, junto al ex ministro de Obras Públicas, Edgardo Berli, y el ex secretario de Hidráulica, Ricardo Fratti. Quince años después, la Justicia todavía todavía no dio su veredicto.

La Causa Inundación está caratulada como estrago culposo el exmandatario pidió en reiteradas oportunidades la prescripción de la misma.

El análisos de los periodistas de LT10

Una vuelta por la vida política de Álvarez

El ex intendente de Santa Fe Marcelo Álvarez llegó a la función pública de la mano de Horacio Rosatti, actual Juez Federal de la Nación que por ese entonces fue el primero de los intendentes de Carlos Reutemann, entre 1991 y 1995. En aquella gestión Álvarez  estuvo a cargo de la Secretaría de obras Públicas.

En 1997 rompiendo fuerzas se enfrentó a Reutemann en unas elecciones para concejales pero la suerte y los votos no lo ayudaron y no pudo ganarle al ex corredor. Tras esa derrota tuvo un acercamiento al ex gobernador Jorge Obeid y por un acuerdo entre Reutemann y Obeid fue candidato a intendente.

Ganó las elecciones de 1999 y a pocos meses de vencerse su mandato la peor inundación que sufrió esta ciudad lo puso en el ojo de la tormenta y para muchos santafesinos fue el responsable de la imprevisión, de la falta de alerta, de la improvisación.

Álvarez y la entrada del Salado

Quizás uno de los peores días de Álvarez dentro de la gestión pública fue cuando, después de la entrada del agua a la ciudad, el mandatario tuvo que dar explicaciones a la prensa de lo ocurrido. “A mí nadie me aviso. Jamás. Nadie ni oficial ni extraoficialmente me dijo cuanto iba a subir el agua” esbozó en aquel momento a la prensa sin mucho éxito y destacó: “Yo creo que se fueron dando una serie de circunstancias no casuales que hicieron que aparezca el sálvese quien pueda y alguien tiene que llevarse la mochila de todo esto. Dijeron que Álvarez tiene que cargarla y  lo estoy haciendo”.