Pese a la diferencia mínima y la tensión en el cierre, Argentina fue superior a Mali. Estuvo por delante del marcador durante casi 39 minutos y, si bien los africanos casi le arrebatan el triunfo, una conversión de Agustín Cavallín en el cierre le dio la victoria por 70-69. De esta manera, los chicos argentinos pudieron despedirse del certamen con una sonrisa. Fue un torneo irregular de la Selección, pero un paso más en un proceso de desarrollo que no está atado ni condicionado por un resultado.

Agustín Cavallín, quien metió el doble de la victoria, fue el goleador con 18 puntos más 5 rebotes. Ezequiel Paz colaboró con 17 puntos, 3 rebotes y 3 asistencias. Máximo Milovich se destacó con 16 puntos más 12 rebotes y Tomás Chapero fue fundamental con 10 puntos más 8 rebotes, 3 asistencias y una importante tarea defensiva. 

Argentina abrió el partido con muchísima confianza y efectividad. La ofensiva lució fluida y en menos de cuatro minutos ya habían convertido cuatro jugadores distintos. Un doble de Máximo Milovich coronó un parcial de 13-3 en favor de nuestra selección que derivó en un pedido de tiempo muerto por parte de Mali. Luego del minuto, el trámite del juego no cambió. Argentina contuvo bien a Oumar Ballo y la diferencia se estiró hasta 14 (26-12) al llegar al primer descanso.

Como sucedió en varios partidos a lo largo del torneo, el conjunto albiceleste tuvo irregularidades. Los porcentajes cayeron en el segundo periodo y Mali castigó con un parcial de 9-0 para acercarse a solo 5 (26-21). Poco después, desde la línea de libres, Ladji Kallilou Dembele puso a los africanos a apenas 4 puntos (31-27). No obstante, con libres de Milovich y un triple de Ezequiel Paz, Argentina tomó aire y se fue al entretiempo arriba por 9 (36-27).

Al regreso de los vestuarios, el trámite del juego fue muy equilibrado. Más allá de que Argentina llegó a escaparse por 12 (43-31), tras una bandeja de Paz, los africanos reaccionaron de la mano de su dupla estelar (Kanoute-Ballo) y recortaron la diferencia a 5 (47-42). De todas maneras, sobre el cierre del periodo, un bombazo de Cavallín sobre la bocina le dio 8 puntos de luz (53-45) a los dirigidos por Lifschitz al llegar a los 10 minutos finales.

En el desenlace, Argentina parecía tener el juego bajo control (ganaba por 10 con 6m31s por jugar). Sin embargo, con el empuje de Ballo bajo las tablas más algunos destellos de Kanoute, Malí limó poco a poco la diferencia y empató en 68 con 58 segundos restantes. Argentina se equivocó y mandó a la línea a Kanoute, quien adelantó a Mali (69-68) con 9 segundos en el reloj. Afortunadamente, en la última acción, en una jugada confusa, Agustín Cavallín metió el doble que le dio el triunfo a nuestra selección.