En el marco de las actividades programadas por la red de pymes lecheras “Acción en Desarrollo”, se realizó durante la jornada de hoy en Cañada Rosquín, el tercer taller de capacitación para empresarios lácteos de la provincia.



La disertación se desarrolló en el auditorio del hotel Pampas de dicha localidad y estuvo a cargo de Héctor Marincioni, del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (Inti). El profesional explicó que “esta capacitación parte de la premisa de aprender de nosotros mismos, creando la confianza necesaria para animarnos a compartir los saberes que cada uno tiene”.



La actividad estuvo organizada por el comité de “Acción en Desarrollo”, el cual está compuesto por el Ministerio de la Producción, el Inti, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta) y la Universidad Nacional del Litoral (UNL).



“Estos talleres intentan fortalecer, no los saberes académicos, sino los prácticos; aquellos que nos permitan reconocer dónde nos encontramos posicionados con nuestras industrias y pensar hacia donde queremos ir”, expresó Marincioni, quien durante más de tres horas desarrolló temas que fueron desde la motivación a la comunicación, pasando por la delegación de tareas, la mejor distribución del tiempo y el empoderamiento al interior de una empresa.



Sumados a los representantes de los organismos que componen “Acción en Desarrollo”, se dieron cita en el lugar una importante cantidad de empresarios del sector lácteo de la provincia.



El origen de esta mesa interinstitucional provincial se dio el año pasado, en el que mediante la firma de un acuerdo, comenzaron a trabajar 11 pymes lácteas junto con el Ministerio de la Producción, en representación del gobierno santafesino; distintas áreas técnicas estatales, como Inta e Inti; educativas (UNL) y las asociaciones de industrias y empresas lecheras (Apymil y Apymel), con el objetivo de mejorar la competitividad y promover el empleo en la cadena de valor lechera.



Desde la red se ha brindado apoyo para fortalecer empresas y tambos en materia de Buenas Prácticas Ganaderas y Manufactureras (BPM) y para favorecer la incorporación de mejores procesos tecnológicos. Se contó, además, con asistencia técnica y capacitación; apuntando también a la defensa del empleo, siendo que las Pymes que la integran involucran más de mil puestos de trabajo.