Cinco bebidas para afrontar las temperaturas altas
Si a vos no te gusta tomar solamente agua pero necesitas refrescarte a cada rato estás en la nota indicada.
La ciudad es un horno y desde todos los organismos recomiendan mantenerse muy bien hidratados para evitar sufrir consecuencias en nuestras salud por el calor. Si bien el agua es lo más indicado, hay personas que no pueden tomarla o que prefieren alternarla con otra infusión, por eso en simples pasos te vamos a dejar cinco opciones refrescantes y fáciles de hacer en casa:
- Limonada
Un refresco casero bien tradicional que se elabora simplemente con jugo de limón, agua y azúcar. Bien fría es una bebida perfecta para el verano. No tiene alcohol, hidrata, ayuda a hacer la digestión y aporta la necesaria vitamina C. Aunque ahora es menos frecuente hacerla en los hogares, sigue siendo la mejor alternativa a las bebidas industriales. Una variante muy veraniega de la limonada es el granizado de limón, que se hace congelándola o añadiéndole hielo.
- Te helado
En verano, un té muy frío es una perfecta opción para los aficionados a esta infusión. Se prepara como si se fuera a tomar caliente pero luego se deja enfriar y se sirve con mucho hielo, un poco de azúcar o edulcorante y, opcionalmente, unas rodajas de limón. Aunque se puede hacer con cualquier tipo de té, el más indicado, teniendo en cuenta que se bebe más cantidad al estar frío, es el té verde, más suave y con menos teína. También el rooibos, que carece de teína. En contra de una creencia muy extendida, el té frío no pierde sus cualidades.
- Batido smoothie refrescante
Un batido compuesto con aquellas frutas que contienen mucha agua será ideal para hidratar, nutrir y combatir el calor. Para esta receta vamos a necesitar:
- 1 taza de sandía
- 1 naranja
- 1 limón
- 2 peras
- Hielo
Agregar los trozos de fruta, que esté bien fría a una batidora, agua (o un lácteo), un poco de hielo y mezclar.
- Aguas saborizadas con frutas y/o vegetales
Mezclar el agua con diferentes frutas o vegetales puede ser una manera estupenda de beber agua y, además, aprovechar el aporte de vitaminas de los productos que utilicemos para saborizarlas. Cítricos (naranja, limón, pomelo…), frutos rojos (fresas, fresón, frambuesas, cerezas, arándanos), uvas, ciruelas, kiwis, melocotones y otras frutas son ideales para dar un toque especial al agua, pero también vegetales, como el pepino, la zanahoria o el apio.
Además, podemos añadir las hierbas aromáticas que mejor vayan con cada producto, como hierbabuena, albahaca, cilantro o salvia, por ejemplo. Y, si os atrevéis a dar un toque original, podéis optar por añadir alguna especia, como canela, cardamomo, jengibre o granos de pimienta.
- Café frappé
Las bebidas a base de café también son otra buena opción para hidratarse. Lo podemos preparar a base de café instantáneo o de cafetera. Lo metemos en una batidora o coctelera y añadimos agua fría y hielo picado, agitamos bien, y tendremos una bebida muy refrescante para tomar durante el día.