Acampan para vacunarse contra la fiebre amarilla
Cada mañana hay cientos de personas haciendo fila en la Dirección de Sanidad de Fronteras de Buenos Aires y en otros vacunatorios.
Por la gran demanda de la vacuna contra la fiebre amarilla, en muchos de los centros de vacunación se registraron demoras, con largas filas a la espera de la aplicación. Alrededor de 200 personas, algunas de las cuales acamparon durante la noche, aguardaron un turno para vacunarse en la puerta de la Dirección de Sanidad de Fronteras, en el barrio porteño de La Boca.
La fiebre amarilla es una enfermedad viral que se transmite a través de la picadura de ciertas especies de mosquitos. Puede ser grave y provocar la muerte. Si bien no tiene tratamiento, puede prevenirse principalmente con la aplicación de la vacuna, la cual es segura, accesible, muy eficaz y una sola dosis es suficiente para brindar protección de por vida. Deben dársela aquellos que estén por viajar a algunas zonas de Brasil.
Según consignó Télam, cerca de las diez de la mañana de este martes se repartieron 50 números para quienes se acercaron sin turno a vacunarse contra la fiebre amarilla antes de viajar a lugares en los que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda hacerlo.
Sucede que las personas que no consiguen algunos de esos números y deben viajar, tienen que esperar a la tanda del día siguiente. Ante la urgencia de la situación, algunos deciden pasar la noche en la puerta del lugar para asegurarse un turno con anticipación.
"Llegamos ayer a las 6 de la mañana, no llegamos (a conseguir un número), entonces tuvimos que quedarnos la noche acá, debajo del puente, sin baño, ni seguridad, ni nada", dijo Franco a esa agencia,mientras esperaba en la fila de la Dirección de Sanidad de Fronteras.
"Somos de Tigre y si íbamos y volvíamos seguramente hoy no conseguíamos lugar, y viajamos en 10 días a Florianópolis, así que estamos justo con el tiempo", agregó.