Y sobre la decisión de tomar a San Martín a cinco partidos del final y con "la soga al cuello", indicó que "en la vida suelen hacerse cosas por impulso. Es cierto que faltaba poco, pero me dio ganas de dar una mano. Con Lanús se nos escapó un partido imposible y hoy el primer tiempo fue todo nuestro. Inclusive arrancamos el segundo muy bien. Por eso me voy con la sensación de que si agarraba al equipo antes no descendíamos. Por eso insisto en que hoy no merecimos perder bajo ningún punto de vista", dijo el "Tano".
"Me da tristeza por ellos, por los jugadores, porque este es un gran grupo. Es una pena que se vayan al descenso por la gente que tienen y por ellos mismos. Boca tuvo cinco jugadas e hicieron cuatro goles, pero es en vano, ya está, mala suerte. Son amarguras difíciles de superar. Ahora vamos a jugar con hidalguía los dos partidos que nos quedan", cerró el entrenador, de 57 años.