Canciller Jorge Faurie: beneficios y desafíos del acuerdo Mercosur- UE
El ministro de Relaciones Exteriores detalló los aspectos más relevantes del convenio con el bloque europeo, de cara a la Cumbre del Mercosur que se realiza en Santa Fe desde este sábado.
Días atrás, y después de décadas de negociaciones, el Mercosur y la Unión Europea firmaron un acuerdo estratégico en materia económica y comercial. Entre quienes participaron de las arduas gestiones estuvo el canciller argentino Jorge Faurie, que este viernes dialogó con El Cuarto Poder por LT10.
En primer lugar, destacó que el convenio se firmó a días de la realización de la Cumbre del Mercosur, que tiene lugar desde este sábado 13 de julio en Santa Fe. Dicha cumbre "siempre es un evento importante, un punto de situación, y en este caso con la presencia de los jefes de Estado para ver lo alcanzado durante el semestre, que ha sido particularmente importante", comenzó, y reafirmó: "el acuerdo UE- Mercosur es uno de los hechos más relevantes de nuestro accionar externo como Argentina y para todos los países miembro".
En ese sentido, aclaró: "no hay que reducir el acuerdo a los productos agropecuarios. Todos los sectores productivos, los sectores de manufacturas industriales y sobre todo también el segmento de servicios están incluidos. La Unión Europea adquiere por año más de 700 mil millones de dólares en servicios, y representa el 30 de las inversiones directas en el mundo. Tenemos allí un potencial para crecer asociado a proyectos productivos o en el área de servicios que los europeos puedan hacer en nuestro país".
Desafíos
Con respecto a los plazos del convenio, Faurie sostuvo que se debe trabajar en la instrumentación por un año y medio, "hasta que quede completamente escrito, traducido y aprobado por los parlamentos (europeos)". Mientras tanto, agregó, se abre "una etapa con una expectativa ordenadora para nuestra economía sumamente importante".
"Argentina tiene que ganar competitividad", postuló. "Este es un espacio que se crea para ganar competitividad a través del acceso a mercado en condiciones favorables".
"El acuerdo de libre comercio lo que hace es reducir las barreras arancelarias (entre ambas partes). Pero con una diferencia: dado el diferente nivel de desarrollo relativo entre uno y otro bloque, la rebaja de aranceles opera en el plazo más corto a favor del Mercosur y para los productos europeos, a partir del séptimo año en adelante", especificó, y añadió: "el acuerdo tiene plazos a 15 años".
Es en ese plazo, indicó el canciller, que Argentina tiene que "agregar valor y calidad", en el marco de un ordenamiento de "las principales variables de la economía: estabilizar la moneda y controlar el déficit, que es una fuente de inflación y al mismo tiempo se refleja después en la tasa de interés para los financiamientos". Pero además, "tenemos que suprimir todas aquellas disposiciones que crean trabas al comercio exterior, que lo dificultan o lo encarecen".
"Tenemos condiciones de competitividad, capacidad de generar calidad, población capacitada, recursos naturales. Solamente (hace falta) una disposición de los argentinos de ponernos a hacer las cosas con sentido positivo y direccionado. Y el acuerdo es una dirección de ordenamiento de nuestra economía. Tenemos que mirar cuánto nos cuesta exportar. Todos conocemos las causas. Tenemos que ponernos a mirar y ver cómo resolverlo políticamente", cerró.