La justicia electoral da por cerrado el recuento con victoria para Morales
En tanto, el Presidente señaló que si hay "dudas" sobre el resultado de los comicios que lo dan como ganador son "bienvenidos" a contar "voto por voto" para que demuestren si hubo fraude.
El reelecto presidente de Bolivia, Evo Morales, reclamó a la comunidad internacional que "empiecen la auditoría, el conteo voto por voto" si existen dudas sobre su triunfo en primera vuelta, un dato que quedó oficializado por el Tribunal Superior Electoral (TSE) pero que el opositor Carlos Mesa persiste en desconocer y, por eso, reclama un balotaje.
El anuncio del cierre del cómputo lo hizo la presidenta del TSE, María Eugenia Choque, en un encuentro ante la prensa, en el que los vocales del cuerpo defendieron la transparencia del cómputo pese a lo cual aceptaron la chance de una auditoría.
"Si tienen algunas dudas, bienvenidos: que empiecen la auditoría, el conteo voto por voto. Convocamos a organismos, opositores, a partidos, a ir municipio por municipio, voto por voto", remarcó Morales.
El desafío constituye una respuesta directa a la OEA -que recibió el respaldo de la ONU- y la Unión Europea, que aún sin cuestionar de fondo el proceso de recuento, recomendaron una nueva pulseada entre Morales y Mesa, en la misma línea de lo que aconsejaron Colombia, Argentina, Brasil y Estados Unidos.
Morales insistió en que iría a una segunda vuelta si se demostrara un fraude y hasta vaticinó que ganaría por "paliza", pero subrayó que "aquí hay un ganador en la primer vuelta", por lo que llamó a sus seguidores a "la resistencia, la defensa de la democracia, la defensa del triunfo del pueblo".
"Respetamos y saludamos el voto urbano, del exterior, pero el voto del área rural garantizó el proceso de cambio, por tanto, el desarrollo del pueblo boliviano. Muchas gracias por el apoyo y ahora tenemos que seguir trabajando por el bien de la sociedad", dijo el jefe de Estado en un acto en Punata.
El recuento oficial del 99,99 por ciento de las actas le da la victoria al candidato del Movimiento al Socialismo (MAS) con el 47,07 % de los votos, frente al 36,51 % del postulante del opositor Comunidad Ciudadana. La diferencia de 10,56 por ciento le permite a Morales evitar la segunda vuelta.
El Tribunal Supremo Electoral se limitó a publicar los datos en su web, sin emitir un pronunciamiento sobre su proclamación oficial.
El mandatario socialista, en el poder desde hace 14 años, lamentó la llamada campaña por la democracia impulsada por la oposición, que convocó a la movilización pacífica para forzar una segunda vuelta electoral. Morales llamó a ese colectivo como "la coordinadora por el fraude".
En su cuenta de la red Twitter, además de algunos mensajes de gestión, Morales escribió: "No estamos solos; estamos fortalecidos con la verdad y la lucha por la unidad y dignidad de nuestra querida Bolivia. El pueblo ganó nuevamente. No vamos a caer en la provocación ni en la confrontación. La lucha democrática y pacífica continuará".
Por su parte, Mesa insistió en el llamado a los bolivianos a mantener una lucha pacífica para no permitir el fraude del que acusa a Morales. "La decisión es clara: el MAS no quiere segunda vuelta", advirtió el ex mandatario, para quien el oficialismo maquinó una "alteración vergonzosa y grosera del resultado".
"Todos lo esperábamos, sabíamos de la testarudez del presidente", concluyó.
En respuesta a esas exhortaciones, los seguidores de Mesa renovaron hoy sus manifestaciones, lo que obligó a cerrar varios accesos del palacio Quemado -sede del Ejecutivo-, mientras que en varios puntos de La Paz y otras ciudades importantes se mantenían barricadas.
Estaba abierta, también, la chance de otras marchas, una de ellas con destino al Tribunal Supremo Electoral (TSE). Los tribunales electorales fueron blancos de varios ataques de estos días, y hasta se incendiaron algunas sedes.
En ciudades como Santa Cruz -un bastión opositor-, Sucre, Oruro, Potosí y Tarija los manifestantes mantienen el paro cívico al que convocaron el lunes, lo que deja comercios cerrados y bloqueos de vías, de acuerdo con el diario El Deber.
Las protestas obligaron a una situación de virtual acuartelamiento de la Policía, según explicó el director nacional de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), William Cordero. "Estamos en estado de listeza", remarcó, y reportó la estatal agencia ABI.
Producto de escaramuzas en las calles, y de escasos choques entre oficialistas y opositores, se registraron 57 detenciones y 29 personas fueros heridas, según un informe de la Defensoría del Pueblo boliviana.
Todos los detenidos ya fueron liberados y entre los heridos se cuentan tres menores, cuatro policías y dos periodistas.
Por la tarde, el TSE llamó a una sorpresiva conferencia -desde el miércoles que no informaba- para anunciar que daba por terminado el recuento y revelar que aceptaba una eventual revisión de parte de organismos internacionales. “Estamos abiertos a una auditoría”, señaló la jueza María Eugenia Choque.