La historia de tres deportistas santafesinos que cumplen sus sueños en el exterior

Diez en Deportes realizó una producción especial con la jugadora de hockey Candela Carosso, con el nadador Santiago Grassi y con el basquetbolista Federico Van Lacke, quienes contaron sus experiencias de vida.

Santa Fe fue siempre cuna de grandes deportistas. Muchos de ellos se destacaron a nivel nacional, mientras que otros se atrevieron a traspasar las fronteras para perfeccionarse y desarrollarse en el primer plano internacional.

Este es el caso de la jugadora de hockey Candela Carosso, del nadador Santiago Grassi y del basquetbolista Federico Van Lacke, quienes luego de destacarse a niven local y nacional, comenzaron a profundizar con mucho éxito sus desempeños en el exterior.

Diez en Deportes habló con los tres deportistas santafesinos, quienes contaron su experiencias de vida y de desarrollo a nivel internacional, cómo es vivir lejos de sus afectos y su hogar, para perseguir su gran sueño.

Santi Grassi se encuentra en Estados Unidos preparándose para los Jegos Olímpicos de Río de Janeiro, y comenzó contando: "Estoy en Atlanta, en la semana de acción de gracias, con lo cual no tenemos acción y generalmente estoy viviendo en Alabama".

"Mi adaptación no fue fácil para nada, cuando llegué me costó mucho entender a las personas, el hacerme entender. Prácticamente aprendí inglés en tres meses, porque no sabía absolutamente nada y tenía que rendir los exámenes para ingresar a la Universidad. Lo tomé como un desafío, todos los días aprender una palabra nueva, en vez de frustrame intentaba hacerlo de nuevo y aprender. Me llevó mi tiempo, ese fue el desafío más grande, el hablar sin tener que repetir todo", agregó en otra parte.

En cuanto a lo que extraña de Santa Fe, dijo: "Muchas cosas, los santafesinos somos totalmente diferentes, ya que tus amigos en la Argentina son las personas en las que podés confiar y sabés que podés apoyarte en ellos, la que nos conoce no es muy amigable, no te saluda. Cada uno está en su propio mundo. En Estados Unidos es diferente, las relaciones no son tan sinceras y fuertes, pero el extraño que no te conoce es muy respetuoso y amigable, eso me gusta y me hace sentir cómodo. Pero no hay nada como el relato de Dady Brieva que me haga sentir cansado o que no aguanto más. Extraño mucho el asado con amigos, el ir a pescar, el quedarme después de la cena hablando por horas. Acá se come un asado que es a las 6, termina a las 6.30 y luego la gente se va".

Luego contó cómo le fue desde lo deportivo y afirmó: "Como todo deporte de marcas me costó, en un momento estaba estancado, me costaba bajarlos, este año logré lo que estaba buscando, me sentí más cómodo, nadando en piletas de 25 yardas. Cada año fui mejorando un poco más".

Federico Van Lacke, que viene de jugar en Gipuzkoa Basket, manifestó: "Estoy en San Sebastián, al norte de España. Mi adaptación siempre fue muy buena, ya que tengo la ventaja que siempre hay argentinos. El año pasado había jugadores de Georgia, Senega, catalanes y un vasco, no había ningún español de naturaleza. De chico siempre estudié inglés, así que pude manejarme bien con el inglés. El idioma que se habla en el básquetbol internacional es el inglés. El año pasado también empecé a aprender francés, y me gusta mucho aprender idiomas para comunicarme cada vez con más gente".

En cuanto a lo que extraña de Santa Fe, indicó: "Muchas cosas, lo principal es la familia, mis padres, mis hermanas y mi familia entera. A mi grupo de amigos, la peña que nos juntábamos para pasarla bien, los asados de los domingos, aunque con mi familia hace un tiempo que no comemos carnes rojas. Ese protocolo, de prender un fuego, compartir, de tomar mates, son momentos únicos, que solo se viven en casa. Otra de las cosas que extraño mucho es mi club Regatas, ver el río, pasar por la puerta del club o pisar el Tribu Mocoretá, que fue mi cable a tierra. También la pesca, con todo el protocolo que lleva la actividad en sí y para compartir un gran momento".

Fede contó cómo le está yendo en la actualidad y dijo: "Tengo 39 años, estoy en la parte final de mi carrera. No estoy jugando y estoy viendo dónde hacerlo, no tuve la oportunidad de ingresar en la Liga ACB, quería jugar luego en la Segunda División pero hay muchas diferencias, sobre todo económica. No llegó una oferta que me termine de convencer para emprender mi último o penúltimo año de mi carrera. Estoy entrenando, lo hago todos los días. Me levanto a las 6.30 y de 7.30 entreno, a las 9.30 voy al gimnasio, la sigo luchando y peleando para estar de buena forma para encontrar un equipo y estar a la altura de lo que exigen las competencias europeas".

Candela Carosso, quien se desempeñó en HC Argentia de la Primera División de Italia, entre otras cosas, reveló: "La clave es estar abierta a lo que puede pasar y ser lo más sociable posible para adaptarte al grupo y a la ciudad. Fui muy tímida, pero los italianos me integraron súper bien. Vivo en una ciudad que es una isla muy linda, con lo cual a uno le gusta vivir allí".

Y agregó: "La isla donde vivo las personas son muy felices, los vecinos son muy buena onda. Tengo nutricionistas y me cuido muchísimo, cuando llegan los torneos es cuando una más se pone las pilas. Eso es fundamental", agregó en otra parte de la charla.

"Lo que más extraño es mi familia, mi club y mis amigas. Odio las despedidas ya que me ponen muy triste. Es lo que más me cuesta y me sigue costando un montón", confesó Cande.

Sobre su actualidad en el hockey, afirmó: "En lo deportivo me fue de manera increíble, no caigo todo lo que viví y estoy viviendo, todo esto no se consigue sin un esfuerzo, sin sacrificio. Estoy muy feliz por el momento que estoy pasando, esto recién empieza y es un empujón para seguir evolucionando".

Audio:

Su navegador no soporta audio HTML