Entre la ensalada de portazos que ha dado Ferrari en las últimas horas, a Alonso, Verstappen o Mick Schumacher, ha trascendido la lista contraria, la que tiene luz verde futura para aterrizar o seguir en Maranello. En verde está Charles Leclerc, cuyo futuro innegociable, y Hamilton, al que por primera vez en 13 años han tirado los tejos sin miramiento, y con el que han mantenido dos conversaciones, informales o como se quiera, pero reales.

Incluso Carlos Sainz, literalmente, no es descartable, según reconoció el propio jefe del equipo, Mattia Binotto, durante la reunión navideña anual en Maranello. En esa lista incluyó también a Giovinazzi, se supone en ambos casos que para acompañar a Leclerc, que es la inversión de futuro oficial. "Todo son posibilidades reales", afirmó.

Carlos, que seguirá en McLaren en 2020, acabaría con 25 años y seis de carreras a sus espaldas, "y necesitamos pilotos con experiencia a partir de 2021 por el cambio de reglamento", afirma Binotto. El español, que ha logrado su primer podio esta temporada, encajaría como un guante ya que es un seguro de vida en pista y sabe hacer equipo fuera. Su gran temporada, acabando como el mejor de los mortales, 6º, le ha colocado como futurible entre los grandes, ya que ha sido considerado por la F1 como el tercer mejor piloto de la temporada.