Confirman que el hincha que murió fue atropellado a propósito
El aficionado del Vultur Rionero italiano fallecido este domingo, tras ser atropellado por un coche conducido por tres hinchas rivales, fue arrollado "voluntariamente", según informó este lunes el prefecto de Potenza (sur) tras convocar un Comité de Seguridad y Orden Público.
"Se trató de un ataque premeditado, un episodio gravísimo e inconcebible", aseguró el prefecto de la ciudad de la región Basilicata, Annunziato Vardé, en declaraciones publicadas por los medios italianos.
El suceso se produjo en la mañana italiana del domingo, cuando un Fiat Punto conducido por tres hinchas del Melfi atropelló a un grupo de aficionados del equipo rival Rionero, matando a Fabio Tucciariello, de 39 años, e hiriendo a otra persona.
La afición del Rionero se había reunido en las cercanías de la estación de Vaglio de Basilicata antes de acompañar al equipo en la visita al Brienza, y fue atacada por unos hinchas del Melfi, club que se mediría ese mismo día con el Real Tolve en la quinta categoría del fútbol italiano.
En el lugar del atropello la Policía local encontró objetos contundentes y, tras bloquear e identificar a los tres responsables, aclaró que se trató de un gesto voluntario en el ámbito de unas peleas entre hinchas radicales.
El prefecto de Potenza destacó que lo ocurrido adquiere aún más gravedad considerado que el aficionado no falleció en la zona de un estadio ni a causa de unos altercados previos a un partido entre dos equipos rivales.
"Hay que tomar medidas contra los aficionados violentos, para aislarles. Evidentemente, los servicios de orden público no son suficientes. El hecho no ocurrió cerca de un estadio ni entre aficiones de dos equipos que se medirían en un partido", dijo.
Es el segundo caso en poco más de un año en el que un aficionado muere a causa de unas peleas entre hinchadas en el fútbol italiano.
El 26 de diciembre de 2018, en los prolegómenos del partido de la Serie A (Primera División) entre Inter de Milán y Nápoles, un aficionado del Varese, Daniele Belardinelli, murió tras ser atropellado por un vehículo conducido por Fabio Manduca, ultras del club napolitano.
También en ese caso la Policía informó de que se trataba de un atropello voluntario y Manduca fue arrestado el pasado 18 de octubre con la acusación de homicidio voluntario.