Las fábricas de los equipos de Fórmula 1 están cerradas por reglamento (se cambiaron las vacaciones de verano a estos días), pero eso no quita para que los ingenieros trabajen en sus casas o a que antes ya se realizaran distintas tareas. Es el caso de Ferrari. Sus instalaciones en Módena y Maranello están bajo llave, pero se buscan soluciones para solventar los problemas que pusieron de manifiesto en la pretemporada.

En los test de Barcelona se vio que los monoplazas de la 'Scuderia' no estaban al nivel, altísimo, de Mercedes, y que hasta Red Bull parecía por delante de ellos. Por eso se buscaron explicaciones.

De este modo, según diversas informaciones, incluyendo La Gazzetta dello Sport, Ferrari habría ya rediseñado su coche de 2020, el ya bautizado como SF1000. Los italianos habrían trabajado, sobre todo, en tres áreas: la aerodinámica, las suspensiones y el motor de combustión.

En cuanto a la aerodinámica, no pueden cambiar todo el chasis, pero sí lo han hecho con el morro. En los test, ya se vio que Red Bull, Racing Point o Renault seguían la línea marcada por Mercedes de afilar más su 'nariz'. Al parecer, el nuevo realizado por Ferrari habría 'adelgazado' el que se vio en Montmeló.

Sobre las suspensiones, se ha trabajado, concretamente, en la de las ruedas. Así, se habría añadido un elemento hidráulico para hacerlas trabajar mejor.

En cuanto al motor, se busca ganar caballos con el mismo consumo de combustible. En Barcelona no le dieron mucha importancia al hecho de que en recta perdían velocidad punta respecto a otros. Lo achacaban a que habían centrados sus esfuerzos en buscar carga aerodinámica más que en el motor. Ahora, sin embargo, han variado su objetivo y están mirando cómo ganar esa potencia extra con el propulsor.