Patricio Walmsley murió cuando el avión sanitario en el que viajaba se estrelló cerca del aeropuerto de Esquel, en la provincia de Chubut.

El vuelo tenía como destino esa ciudad, en la que junto al médico Ramiro Federico Bassi iban a asisitir a una niña paciente oncológica.

Tenía 41 años y una vida comprometida con el ámbito de la salud. Había sido parte de Médicos Sin Fronteras, organización con la que trabajó en Níger, República Centroafricana y República Democrática del Congo.

También se había entrenado en Francia e Inglaterra para desempeñar tareas de rescate en países de muy escasos recursos.

La Despedida de Médicos  Sin Fronteras

"Pato, como le decíamos, fue un enfermero muy dedicado y comprometido. Durante su labor con Médicos Sin Fronteras (MSF), trabajó en proyectos en lugares como Níger, República Centroafricana y República Democrática del Congo (donde vivió durante tres años). Sorprendía a todos con su buen humor, su energía y su dominio del idioma swahili.

Ha marcado la vida de cientos de personas, tanto en la atención directa a pacientes, la implementación de campañas de vacunación o en la capacitación y supervisión de sus colegas. Cuando no estaba en terreno haciendo trabajo humanitario, participaba con mucho entusiasmo de reuniones de donantes, charlas para invitar a nuevos profesionales a sumarse y conferencias para acercar al público argentino su experiencia de trabajo con Médicos Sin Fronteras en lugares tan alejados".

Patricio  había viajado alrededor del mundo para ayudar en distintas causas. Era uno de los especialistas más destacados en la Aeroevacuación médica argentina. Vivió y murió en esa tarea.