Matías Cagliero, una de las caras nuevas que tienen las formativas de Unión, abordó diversos temas de su vida en medio de esta cuarentena por la pandemia del coronavirus.

En el inicio confesó que “arranqué a los 4 años en Kimberley teniendo como entrenador a Mariano Mellit, después me fui a Santa Rosa porque nos mudamos con mi familia. Al principio era un desastre, el equipo iba para un lado y yo para el otro. En Santa Rosa tuve al Pata Valentini, Mono Vázquez, Evelyn Caisso y Diego Noe”.

El 2019 lo cerró con un subcampeonato local y varios títulos con las selecciones asociativas. Al respecto consideró que “me sorprendí yo y los chicos de Santa Rosa porque no teníamos tantas expectativas y llegamos más lejos de lo que pensamos. Estoy muy satisfecho por eso. La decisión era buscar crecer, sentía que había absorvido todo en Santa Rosa y Unión era una linda posibilidad de progresar”.

Para más adelante, acotar: “Por suerte el año pasado ganamos el Provincial y después el Argentino U15 en casa. Lo mejor fue compartirlo con Octavio Córdoba, Diego Collomb y Bauti Rodríguez. Con un estadio lleno, sigo viendo los videos y me emociono mucho. En los procesos de Selección trabajé mucho la cabeza y aprendí a ser fuerte”.

Cuando se refirió a su posición dentro de la cancha, Cagliero disparó: “En Unión y en el último proceso de Selección estaba jugando de tres o de cuatro, según lo que necesite el equipo. En Santa Rosa tuve una experiencia de base. Con algunas falencias pero pude llevar adelante el equipo”.

Si bien estaba transitando los primeros meses con la camiseta de Unión, el joven jugador no dudó en expresar que “desde el primer día que llegué me hicieron sentir muy cómodos. Además de jugar con mi categoría, Víctor Cepeda me sumó a U19. Por allí por los horarios aún no tuve la posibilidad de entrenar con la Primera local, pero seguramente eso pasará pronto”.

Al momento de brindar una opinión del equipo profesional rojiblanco, al que vio mucho la última temporada, Cagliero apuntó que “se hizo muy fuerte de local, un equipo joven, terminó en los primeros puestos, nos encanta con mi familia ir a ver a Unión, porque uno ve otros clubes y el nivel de la competencia”.

Santa Rosa es parte del trayecto que ejecutó el juvenil santafesino, por eso el cariño y respeto mutuo perduran: “Santa Rosa es el club que me dio todo, nunca me dijo que no a cualquier experiencia. Estoy completamente agradecido al club, a los entrenadores, cuando decidí irme me apoyaron, tenía ganas de seguir creciendo y esto es parte de ello”.

Cagliero reside en Recreo y cursa sus estudios secundarios en el Colegio San José, con lo cual el apoyo de su familia tiene mucho que ver en el esfuerzo que realiza día a día para venir desde lejos a jugar, en este caso en Unión. Al respecto enfatizó que “la familia es lo que me da todo, me aguante siempre y estaré eternamente agradecido por ello. Son mis taxistas, mi hermana me aguanta mucho, se clava todos los partidos, por eso yo lo valoro mucho”.

Los sueños de “Caballo”, tal como lo apodan muchos en el ambiente local, son los de muchos jóvenes a su edad en el deporte de la americana: “Soy de soñar mucho, de pensar el día de mañana si podría estar en una Liga Nacional o en un equipo importante. Me pasa mucho en cuarentena que me pongo a tirar y me veo el día de mañana, me lo imagino, eso me gusta mucho”.

En su despedida, como hacen todos los chicos que pasan por el IG Live de Marca Personal, Cagliero dejó un mensaje muy lindo al afirmar que “si querés llegar todo es cuestión de esfuerzo, cuando era Mini y veía las categorías superiores y los procesos de Selección, se me hacía muy lejos. Siempre quise llegar y estar en ese momento, por suerte se dieron las cosas como quería. Es todo cuestión de esfuerzo, nunca hay que aflojar”.