La muerte de George Floyd y un grito de basta al racismo

Una ola de protestas parece no tener fin tras la muerte violenta de un ciudadano por parte de la policia de Minnesota. Nuevos videos muestran que el hombre no se resistió al arresto.

En los últimos días, una ola de protestas se ha levantado en Estados Unidos después de la muerte violenta de un ciudadano afroamericano, George Floyd, supuestamente a manos de un agente de policía del estado de Minnesota.

Las revueltas llegan en un momento complejo para el país, duramente azotado por la pandemia de coronavirus (por la que ya han perdido la vida más de 100.000 estadounidenses) y con unas inusuales cifras de paro (40 millones de personas se encuentran sin empleo) y han alcanzado un sorprendente nivel de conflictividad, que recuerda a los disturbios de Los Ángeles en 1992, tras el asesinato del taxista Rodney King.

¿Cómo murió George Floyd?

George Floyd era un ciudadano afroamericano de 46 años que se había mudado a Minneapolis, capital del estado de Minnesota, en busca de una vida mejor. Allí, encontró trabajo como personal de seguridad en un restaurante, mientras seguía intentando dedicarse a su vocación de ser camionero. Floyd, padre de dos hijas de 6 y 22 años, había perdido su empleo debido al confinamiento decretado en el estado con motivo de la pandemia.

Sin embargo, el lunes pasado, cuatro agentes de policías le detuvieron en una tienda de alimentación después de que el establecimiento denunciase que había intentado pagar con un cheque supuestamente fraudulento.

Los policías esposaron a Floyd y, posteriormente, uno de ellos sujetó con la rodilla el cuello del detenido contra el suelo. Imágenes del momento grabadas por peatones y por cámaras de seguridad se difundieron después por redes sociales, en las que se ve a Floyd suplicando y diciendo que "no podía respirar". 

Poco después, se declaró su muerte en un hospital cercano.