Este jueves a las 11.30 de la mañana, todos los cuarteles de Bomberos de la ciudad más los de Santo Tomé y Rincón, las dependencias policiales y las ambulancias, hicieron sonar sus sirenas para honrar la memoria de Gastón Vázquez y Maximiliano Firma Paz, los dos bomberos fallecidos durante las explosiones en la perfumería de Villa Crespo.

Claudio Arias, bombero santafesino, indicó por "De 10" el homenaje se debe a que, si bien la tragedia ocurrió en Buenos Aires, "caló muy hondo" y generó una congoja muy grande en los oficiales santafesinos: "Somos todos hermanos en el fuego".

"El trabajo de los bomberos es muy especial, uno tiene que tener un carisma especial y una vocación, y una vez que comienza con su trabajo es algo que va más allá. Uno ya incorpora al cuartel como su segunda casa, y al bombero como una verdadera familia", explicó. 

"Uno cuando sale a una emergencia, se sube al camión con ganas, expectativas, ansias, pero no tanto miedo. Quizás después, a la vuelta, uno hace una evaluación y se pone a pensar 'qué hubiera pasado si...', pero en el momento de ir a la intervención no nos detenemos a pensar en el peligro porque sería limitar nuestra profesión".

Además, remarcó que se trata de una profesión riesgosa, que abarca muchos aspectos de la emergencia. "Estamos en accidentes de tránsito, en inundaciones, derrumbes, grandes catástrofes, tormentas. Es un abanico muy grande. Los chicos están en entrenamiento continuo y eso hace que puedan intervenir de la mejor manera y brindarle a la sociedad el nivel de trabajo que esta espera".

Audio: Claudio Arias (jefe de Bomberos)