Siguiendo la línea de las decisiones que han tomado organizaciones como la NBA y la MLS -que mudarán sus torneos a Orlando para finalizarlos-, la UEFA estaría a punto de confirmar que lo que resta de la Champions League y la Europa League se disputaría también en una sede única e incluso con menos partidos, con Lisboa y Münich, respectivamente, como las elegidas.

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Según informa el Diario Marca, desde el máximo ente del fútbol europeo ya habrían mantenido un primer contacto con las federaciones portuguesa y alemana para saber si están en condiciones de albergar las competiciones si es que Estambul y Gdansk -las dos ciudades que deberían organizar las finales- no pueden hacerlo.

Ahora bien, cabe mencionar que la mudanza no sería sólo para los partidos finales sino que podría ser para todos los partidos que restan por disputarse. Es que, si bien en un principio desde UEFA no pensaban en cambiar el formato de la competición ni en quitar viajes, lo cierto es que la situación sanitaria dispar que vive Europa como consecuencia de la pandemia de coronavirus pondría en riesgo a todos los jugadores por la cantidad de viajes a realizar.

De esta manera, la opción que parece picar en punta sería la de disputar los partidos que faltan jugarse de octavos de final, los cuartos de final, las semifinales y la final en una sede única, como lo decidieron la NBA y la MLS con Orlando. Al mismo tiempo, los partidos eliminatorios serían a un partido único.

Todo esto ayudaría no sólo a controlar mejor a los jugadores (que viajarían una vez y estarían todos en el mismo lugar) sino que además permitiría terminar las competiciones en once días y así no demorar demasiado el inicio de la temporada siguiente.

Desde Turquía, el Ministro de Deportes, Mehmet Kasapoglu, no quiere saber nada con perder la sede de la final de la Champions League, que debería disputarse en Estambul: "No tengo ninguna duda de que la final se disputará de la mejor de las maneras en Turquía. Estamos convencidos de que tendremos buenas noticias el 17 de junio".

Por lo pronto, Aleksander Ceferin, presidente de UEFA, quiere mantener a Estambul y Gdansk como sedes de ambas finales, pero también entiende que la situación es dinámica, por lo que Lisboa y Münich se mantienen al pie del cañón a la espera de novedades.