El analista político Rosendo Fraga dialogó con LT10 sobre las razones que, en muy pocos días, provocaron las marchas y contramarchas del gobierno nacional respecto a la expropiación de la empresa Vicentin. 

En diálogo con "De 10", Fraga señaló que estas "idas y vueltas" de Alberto Fernández se explican a raíz de tres hechos puntuales: el fallo judicial de primera instancia adverso al gobierno, el "banderazo" del sábado que se extendió más allá de la provincia de Santa Fe, y la percepción de que el oficialismo no tenía mayoría en Diputados para aprobar la expropiación. 

"Hasta hace 3 días, la reedición de la 125 parecía improbable, pero a partir del sábado pasó a ser un escenario posible. La posibilidad de una reacción del campo nacional, relevante, con distintos sectores, hasta el viernes parecía improbable. A lo sumo se podía esperar una protesta restringida al ámbito de la provincia de Santa Fe, pero esto no fue así, entonces el fantasma de otro conflicto como la 125 está planteado como posibilidad", señaló Fraga.

Según el analista, este nuevo escenario planteado desde el sábado con las manifestaciones masivas, convirtió la posible expropiación de Vicentin en un conflicto nacional. Esto explica el cambio de rol asignado por el gobierno de Alberto Fernández al gobernador santafesino en la decisión: "Pensaron que a Perotti no lo necesitaban, pero entra a jugar cuando el gobierno nacional percibe que lo necesita porque Vicentin se le empezaba a transformar en un conflicto".

Sobre el futuro de esta situación, Fraga señaló que "estamos en un proceso con velocidad": "Hasta el viernes era un conflicto provincial y a partir del sábado pasó a ser un conflicto nacional, y este es el punto. Al ser un conflicto nacional, el conflicto local no desaparece pero se atenúa, y se diluye en un conflicto nacional". 

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