Grecia le pedirá una prueba negativa de coronavirus a quienes entren por tierra
La medida empezará a correr a partir del próximo martes. De esta manera esperan frenar el aumento de casos importados, fundamentalmente desde los Balcanes, registrados desde la apertura generalizada de las fronteras hace dos semanas.
El Gobierno griego exigirá a partir del próximo martes pruebas negativas de coronavirus a todos las personas que entren al país por la frontera terrestre con Bulgaria, la única que está abierta.
Con ello, el Ejecutivo del primer ministro conservador Kyriakos Mitsotakis, espera frenar el aumento de casos importados, fundamentalmente desde los Balcanes, registrados desde la apertura generalizada de las fronteras hace dos semanas.
El portavoz del Gobierno, Stelios Petsas, señaló que las pruebas en cuestión deberán haberse realizado como muy pronto 72 horas antes del viaje.
Petsas hizo este anuncio tras una reunión extraordinaria en la sede del Gobierno para analizar cómo atajar un nuevo potencial peligro sanitario.
Este jueves entraron en Grecia a través de la frontera terrestre 12.000 ciudadanos procedentes de la Unión Europea (UE) y 260 de terceros países, informó el Gobierno.
La cifra, no obstante, es claramente inferior al mismo día de la semana pasada, en que ingresaron 2.100 extracomunitarios y 20.000 de la UE.
Autoridades sanitarias dijeron hoy que de las 50 nuevas infecciones por Covid-19 registradas el jueves, 27 eran de casos importados.
El portavoz del Gobierno anunció asimismo que a partir de ahora se incrementarán los controles en bares y restaurantes para verificar que se están cumpliendo las normas de seguridad.
El Gobierno y los expertos sanitarios se han mostrado en los últimos días preocupados por la laxitud que están mostrando muchos ciudadanos, un comportamiento que contrasta con el buen ejemplo dado por Grecia mientras estuvo bajo confinamiento, hasta mayo.
"El aumento de los casos importados y de los nacionales ha hecho sonar la alarma, requiere que pongamos un freno a la peligrosa complacencia, porque el virus no se ha marchado, está aquí y se alimenta del comportamiento inaceptable de la relajación", recalcó Petsas.
Con todo, el aumento de casos hasta un total 3.672 -con una cifra de muertos que se mantiene en los 193- sigue siendo moderado.