En los últimos días se desató un escándalo en las redes alrededor de la figura de Adabel Guerrero luego de que le regalara a su hija Lola un caniche toy, ya que la acusaron de abandonar a los chihuahuas que tenía como mascota antes del nacimiento de la nena y de fomentar la compra de animales de raza.

Después de ver las repercusiones en las redes, la bailarina se cansó e hizo un fuerte descargo.

“Estoy realmente harta de la gente que interpreta todo como el orto… me tienen repodrida. Me sacan las ganas de hacer historias. Tienen la cabeza podrida. Mis perritos se las di a una amiga para que me las cuide. Después de un año me dio lástima sacárselos porque su hija se había encariñado. Los tiene una familia que es como la mía, yo viví en su casa cuando mi vieja se murió. Sé a quiénes les estoy dando a quienes eran como mis hijas. No me rompan las pelotas”, empezó la protagonista de “Sex virtual”.

Además, explicó que los chihuahuas no podían convivir con su hija porque la nena los agarraba de la cola o las patas y los animales se defendían a los mordiscones. “Me pareció una decisión ideal que mi amiga se las llevara a las dos. Fue doloroso para mi y encima me tengo que bancar todo lo que dicen. Yo no maltrato a los animales y los tengo como si fueran mis hijos”, expresó Guerrero.

Y compartió imágenes de los perritos con su nueva familia para demostrar que están bien cuidados.