Unión irá con "dos próceres decanos" al Monumental José Fierro
Raúl Heriberto Aredes y Juan Manuel Azconzábal volverán a pisar el José Fierro, ese templo donde han ganado tantas batallas y han escrito páginas gloriosas de la historia de Atlético Tucumán.
Este viernes 13 de noviembre, cuando Atlético Tucumán reciba a Unión de Santa Fe por la Fecha 3 de la Copa de la Liga Profesional, dos grandes ídolos Decanos como Juan Manuel Azconzábal y Raúl Heriberto Aredes saldrán al estadio Monumental José Fierro, pisarán el verde césped, recordarán las hazañas, goles y gambetas en el caso del Zurdo, heroicas salvadas el Vasco... tras emocionarse, saludar y abrazar a algunos viejos amigos, ambos caminarán hacia el banco de suplentes visitante para hacer fuerza contra el Club que tanto quieren y que tanto los quiere a ellos.
Tras la partida de Leonardo Carol Madelón, Unión apostó por el cuerpo técnico que encabeza el Vasco Azconzábal y que tiene como ayudantes de campo a Ariel "Pepi" Zapata y Raúl Aredes: ellos también acompañaron al exdefensor cuando tomó las riendas del plantel Decano y alcanzó el ascenso a Primera de 2015, del que ayer justamente se ha cumplido el 5to. aniversario.
Los hinchas todavía recuerdan el estilo e impronta de aquel equipo con un Pulga Rodríguez implacable, con un Cristian Lucchetti que comenzaba a ganarse el mote de ídolo, con jugadores muy queridos como Leandro González o el Polaco Menéndez, la firmeza de Bianchi - Sbuttoni en la zaga y un incansable Bebe Acosta en la mitad de cancha, con las pinceladas del recordado Emanuel Molina también. Ese fue el puntapié inicial de este Decano acostumbrado a jugar copas internacionales que hoy es puntero de su zona en la Copa de la Liga Profesional con dos triunfos al hilo.
También recuerdan los hinchas los grandes aportes del Vasco en el primer ascenso a Primera, allá por 2009, formando una inolvidable dupla de centrales con Javier "Satanás" Páez: puro oficio, siempre listos para la batalla y hasta elegantes para salir jugando con soltura en más de una ocasión. El 6, que llevó el brazalete de capitán, coronó aquella gran campaña con un gol en el partido decisivo ante Talleres de Córdoba.
¡Y qué decir del Zurdo Aredes! Ningún Decano de buena ley olvidará jamás la tarde del 28 de noviembre de 1998 y el mismo escenario el 10 definió por arriba de Orlando Gómez con una inolvidable vaselina para estampar el 3 a 1, liquidar el clásico ante los primos de Ciudadela y desatar la locura total en 25 de Mayo y Chile.
11 años antes, en 1987, fue el mismo Aredes en el que cambió por completo la final ante Sarmiento de Resistencia por el Torneo del Interior y que otorgaba un pasaje a la B Nacional en plena reestructuración del fútbol argentino.
Su ingreso en el partido de ida fue clave para la remontada Decana: el equipo de Luis Benito Sosa perdía 2 a 0 cuando el DT mandó a la cancha al Zurdo. Victoria de visitante por 3 a 2. El 2 - 0 como local llevó todo el sello de su zurda mágica; con un penal y un tiro libre sentenció el ascenso Decano.
Años después de aquellas hazañas, Azconzábal y Aredes volverán al José Fierro y el pueblo Decano no podrá estar allí para saludarlos, para brindarles una vez más su cariño y para cantar una vez más junto a ellos que Gracias a los jugadores los huevos que ponen para ser campeón porque todos saben que eso no se olvida y que lo dice la hinchada con el corazón.