Unión crece con la fuerza de su semillero

Uno de los pilares fundamentales de todo club son las inferiores. Que una institución deportiva crea en su “semillero” es muy importante

Uno de los pilares fundamentales de todo club son las inferiores. Que una institución deportiva crea en su “semillero” es muy importante. Eso da mucha esperanza e ilusión a las más pequeñas de jugar. En Unión, el hockey se insertó allá por 2017 donde Gastón Rojas con la colaboración de Fernanda Gil fueron los pioneros en este proceso de formación de jugadoras para implementar estrategias en la gestión.

Hoy Fernanda Gil es líder y coordinadora actual de la disciplina. La máxima responsable busca consolidar los equipos de trabajo, donde aplicó sus conocimientos como jugadora (hizo las bases en Cha Roga y actualmente se desempeña como Mamis Hockey en Unión) y fue aprendiendo de otros clubes en su carrera para poder absorber los conceptos necesarios.

Así fue construyendo paso a paso, ladrillo sobre ladrillo y la institución se hizo lugar y se posicionó. Incluso, tomó mayor impulso con la consagración que obtuvo el año pasado del torneo Promocional.

El cierre de este año atípico para todo el deporte produjo la inclusión de las infantiles para su reinicio de actividades. “Arrancamos bastante bien. A las chicas que ya teníamos, se incorporaron muchas más. Hicimos una gran campaña a través de las redes sociales. El club también lo hizo y nos dio un gran aporte. Tenemos alrededor de 50 nenas. Las profesoras, están muy entusiasmadas y cada una da lo mejor para que todo funcione” afirmó Fernanda Gil.

El regreso se tuvo que hacer de manera escalonada por el protocolo que se exigió. “Las dividimos en grupos. Las más chiquitas son las que más nos cuesta por el distanciamiento. Por eso, previo a cada práctica, les acentuamos que tienen que estar separadas unas de otras. Cada una tiene su barbijo y su botella de agua. Además, le tomamos la temperatura” explicó la máxima cabeza visible de la disciplina.

Además, la actual jugadora de las Mamis de Unión agregó que “Todas estaban ansiosas por este reinicio. Empezamos la temporada y siento que cada una se hace amiga del palo y la bocha de nuevo. Cuesta empezar, sobre todo desde lo físico. Con las más grandes apuntamos a trabajos de técnica y aprovechamos para enfocarnos y pulir en ese aspecto con trabajos específicos. Tratamos de emplear ejercicios o actividades que se asemejen a partidos, teniendo en cuenta que aún no se pueden hacer y es lo que más les gusta a las más chicas”.

El semillero se expande

Todo crecimiento te obliga a trazar nuevos objetivos. La temporada se presentaba muy favorable, aunque la pandemia frenó la ilusión. Al respecto, Fernanda Gil señaló que “Teníamos grandes expectativas para este año. Formamos la línea completa del club, con todas las categorías. Nos faltaba Séptima División y Sub-12 que conseguimos armarlas».«Pero la cuarentena por la pandemia, nos retrasó todo. Hay chicas que aún no comenzaron, otras que dejaron y hay nuevas que iniciaron en la actividad. Es como un volver a empezar en este poco tiempo tenemos. Intentaremos amar todo y planificar ya el año que viene”.

Fernanda Gil también se refirió a la responsabilidad, orden de la estructura y también al proceso amplio que implica estar al frente del hockey. “Llevamos cuatro años desde que se insertó la disciplina en la institución. Para un club que recién arranca como nosotros, las infantiles son lo más importante».«Es fundamental que mediante juegos y actividades muy didácticas, ellas se entusiasmen y que sigan. De esa manera, poder mantener y acrecentar la cantidad por categoría. La idea nuestra desde un principio es tener alrededor de 300 y 400 jugadoras, nos falta un poco pero no estamos muy lejos”.