En Europa, el rugby está bien dividido entre las tres ligas de primera categoría (Top 14, Premiership y Pro 14) y otras profesionales, pero de menor relevancia, como División de Honor (España), Top 10 (Italia), Liga Stavok (Rusia), SuperLiga (Rumania), Bundesliga (Alemania) y Didi 10 (Georgia).

Estas competiciones hoy están lejos de poder competir a nivel económico y deportivo, pero desde las naciones de Tier 2 buscan crear una nueva plaza que resulte atractiva para desarrollar jugadores e impulsar, como consecuencia, a los seleccionados.

En principio, los tres países que comenzaron a darle forma a la nueva liga europea son Rusia, que se postuló para albergar la RWC 2027 o 2031, España, Alemania y la ascendente Georgia, con un sistema de franquicias. Y allí también podría insertarse Cheetahs.

Tras ser expulsado del Súper Rugby en 2018, el conjunto de Bloemfontein se encontraba compitiendo junto a Southern Kings en el Pro 14, con buenos resultados. Sin embargo, la pandemia cambió los planes y ahora la unión sudafricana busca instalar allí a Bulls, Sharks, Lions y Stormers.

De esta forma, Cheetahs está en la búsqueda de un nuevo horizonte. Según medios sudafricanos, existía la posibilidad de llegar a América, pero la idea de poder jugar en Europa y acceder a una copa continental resultó más atractiva.

Desde allí, los de Free State tendrían la chance de afrontar la Intercontinental Shield y, de conseguir buenos resultados, ingresar a la Challenge Cup que juegan algunos equipos de las tres competencias top.

El portal Rapport adelantó que Cheetahs, un equipo que es ya una marca registrada en la historia del rugby sudafricano, ya tiene el visto bueno de los sponsors y la televisión y se espera que para febrero de 2021 se haga un anuncio oficial.