Tiempo de pruebas en Central, que rápidamente se traducirá en tiempo de definiciones, aunque para eso aún falte. El Kily González ya comenzó decididamente a pensar el equipo que pondrá el próximo domingo en cancha del líder e invicto Colón. Y en el primer ensayo futbolístico de la semana se la jugó por el ingreso de Gastón Avila, de quien se habló mucho en estos días, aunque se sabía que lo iban a analizar día a día para ver si podía llegar en condiciones después de la lesión en el hombro derecho que sufrió frente a Racing. Este jueves el Gato no sólo estuvo en cancha, sino que su inclusión tuvo una repercusión automática en lo que se refiere a la táctica. Porque otra vez el Kily intentó con tres en el fondo, que claramente serían cinco cuando el equipo sea despojado de la pelota. La aparición de Avila fue por Francesco Lo Celso, la única modificación teniendo en cuenta lo que fue el equipo el pasado lunes ante Arsenal en el Gigante.

Seguramente esta disposición táctica del equipo, en caso de darse por supuesto, es el dato saliente en la previa de ese partido que piensa el Kily, quien no es la primera vez que utilizaría una línea con tres (o cinco) defensores. Ya lo hizo en varias ocasiones en la pasada Copa Diego Armando Maradona.

Avila se golpeó el hombro contra Racing y no pudo seguir en cancha. Al día siguiente los estudios por imágenes que le realizaron arrojaron una lesión articular que, según el parte médico, le iba a llevar entre “dos y tres semanas” de recuperación. Lo que trascendió de este último entrenamiento es que el defensor se encuentra mucho mejor de la lesión.

Ya el miércoles Avila había participado del fútbol con los suplentes, aunque se lo vio (la práctica fue abierta para la prensa después de un año) tomando algunos recaudos importantes, siempre con el brazo derecho más pegado al cuerpo y sin exigirse demasiado en algunos movimientos. Lo que se supo después, desde gente allegada al cuerpo técnico, fue que el Gato podía tener una posibilidad de jugar, pero que iba a ser necesario examinarlo en el día a día, sobre todo en los entrenamientos de jueves y viernes.

Y lo dicho, el Kily y el cuerpo médico lo deben haber notado en condiciones óptimas, ya que el entrenador lo mandó a la cancha para el equipo titular y así conformar una línea de tres en el fondo, más Nicolás Ferreyra y Joaquín Laso, a quienes el Kily probó como líbero y le habría gustado más Ferreyra. La línea defensiva también formarían parte Damián Martínez por la derecha y Lautaro Blanco por la izquierda. De ahí en más, la cobertura de espacios será con los nombres que quedan: Sangiovani, Villagra, Vecchio, Cucchi y Marco Ruben.

Después de la victoria con Arsenal en el Gigante y de la tranquilidad que logró el grupo, en especial el cuerpo técnico, era obvio que el Kily iba a tocar lo menos posible. Sólo podía llegar a meter algún que otro retoque para reforzar algo muy puntual. Igual no es seguro que la aparición de Avila se concrete, pero desde la prueba misma ya da para especular. Incluso se entiende la búsqueda de alguna variante de acuerdo a lo que fue el rendimiento de Lo Celso, quien tuvo su chance en el ultimo partido y su actuación no estuvo a la altura de las pretensiones del cuerpo técnico.

Posiblemente el poderío futbolístico de Colón sea lo que lleve al Kily a pensar que pese a la última victoria el equipo no sólo debe dar un salto de calidad, sino que necesita jugar de otra forma frente al único equipo que ganó los cinco partidos que disputó. Además de la sincronización lógica que debieran mostrar Ferreyra, Laso y Avila, el interrogante será ver de qué manera ejecutar los movimientos a la hora de buscar el arco de enfrente. En principio, Martínez y Blanco alcanzarían la línea de Sangiovani y Villagra para que Vecchio pueda jugar un poco más suelto, por detrás de Cucchi y Marco Ruben.

Todas esas incógnitas se develarán ya con el partido en marcha, en cada avance y retroceso del equipo, pero siempre y cuando el Kily se incline por el Gato Avila y, por ende, por el cambio de esquema. Al menos ayer dio indicios de que es la idea que tiene en mente.