En la tarde de este lunes pasadas las 16 se produjo el arresto de un hombre de  en la zona de la terminal y tras la identificación del mismo se pudo saber que era uno de los evadidos de la Subcomisaría 2da de barrio Santa Rosa de Lima el pasado 28 de febrero donde se escaparon 11 presos del lugar.

Personal de la brigada motorizada llegó la intersección de calle Belgrano y Avenida Alem tras una denuncia de un automovilista  porque en el lugar se estaban peleando dos grupos antagónicos de limpiavidrios.

Los agentes dieron la orden de alto a los sujetos en cuestión y en ese momento se produjo un forcejeo entre los detenidos y los efectivos policiales. Uno de los policías tuvo que ser atendido por un golpe encima de su ojo izquierdo. Junto al delincuente evadido fueron arrestados también dos personas que serían hermanos. 

Tras el encontronazo los detenidos fueron trasladados en condicion de detenidos a la seccional 1º de la ciudad.  

Es importante aclarar que en este caso sería otro recapturado tras la fuga de finales de febrero ya que con anterioridad uno de los evadidos se entregó en sede policial y otro se presentó junto a su abogado en las oficinas del Ministerio Público de la Acusación. Además otro de los evadidos fue detenido por la policia  en Beruti y P. Pérez el pasado 7 de marzo. 

La Fuga

El 28 de febrero se escaparon 11 detenidos de la subcomisaría segunda de barrio Santa Rosa de Lima, quienes lograron vulnerar los barrotes metálicos de protección y escaparse amparados en la oscuridad de la madrugada.

Los oficiales y suboficiales escucharon ruidos provenientes del penal y súbitamente gritos, cuando los celadores ingresaron a los pasillos para realizar una verificación, lo primero que notaron es que las rejas metálicas superiores y laterales estaban rotas y que faltaban detenidos dentro de las celdas de alojamiento. 

Uno de los 11 presos fugados estaba detenido por homicidio. El incidente reavivó el debate sobre los internos con condena que permanecen en comisarías sobrepobladas y no tienen el traslado a las cárceles santafesinas, también carentes de infraestructura para alojarlos.