El trabajador rural hallado muerto fue amordazado, mutilado y degollado
El cuerpo, que se encontraba en avanzado estado de descomposición, tenía una mordaza de tela ceñida a la boca anudada por detrás y otras en el cuello.
Alejandro Ochoa, el trabajador rural que fue encontrado muerto cerca de la localidad puntana de Cortaderas seis días después de ser golpeado y secuestrado por un grupo de hombres, fue amordazado, mutilado y degollado, según un informe pericial preliminar.
De acuerdo con lo detallado el sábado en un comunicado por la Dirección de Prensa y Comunicación Institucional del Poder Judicial, el cuerpo, que se encontraba en avanzado estado de descomposición, tenía una mordaza de tela ceñida a la boca anudada por detrás y otras en el cuello.
El perito judicial Gustavo Lafourcade dijo además que se observó "una herida cortante que compromete totalmente la tráquea y grandes vasos sanguíneos".
Por otro lado, se encontraron en el cuerpo "lesiones en el rostro, zona dorsal, tórax, abdomen, extremidades superiores e inferiores".
Por el nivel de descomposición del cuerpo, se infiere que la muerte se produjo unos cinco días antes de su hallazgo.
El informe fue elevado desde la Morgue Judicial de Concarán a la jueza de esa localidad, Patricia Besso, que entiende en el caso.
El cadáver hallado el viernes pasado al mediodía en una obra en construcción del paraje El Adobe, a unos dos kilómetros de la zona urbana de Cortaderas, fue reconocido al día siguiente por Fernando Ochoa, hermano del trabajador rural de 35 años.
La autopsia del cadáver, que había sido programada para el sábado, fue postergada para este domingo y se realizará en la Morgue Judicial de Villa Mercedes.