En la AFA ya diagraman el borrador del próximo torneo de la Liga Profesional. En 2022, la fecha del mundial trastocará todo tipo de organización y en la casa madre del fútbol argentino todavía no logran ponerse de acuerdo.

El torneo sería todos contra todos, a una ronda y, naturalmente, con clásicos distribuidos a lo largo de las 25 fechas. Iniciaría el 17 de julio y finalizaría el 10 de diciembre. 

Atrás quedarían las copas de formatos extraños que sirvieron de puntapié para reanudar la actividad tras la cuarentena, pero un interrogante quedaría por resolver y es lo que está haciendo ruido en las oficinas de la calle Viamonte: los descensos. Según lo estipulado, ningún equipo perdería la categoría hasta fines de 2022, pero esa organización puede ser perjudicial por varios puntos. En primera instancia, que la cantidad de clubes en Primera División se agranda cada vez más y se complica organizar los torneos, y en otro plano aparece el cambio de fechas para el mundial de Qatar, que en vez de ser entre junio y julio será entre noviembre y diciembre.

Si bien la lucha por la permanencia no le influye a San Lorenzo, el formato de los torneos dirimirá, entre otras cosas, las clasificaciones a las copas internacionales. De cara al plano internacional en 2022, solamente Colón de Santa Fe (campeón de la Copa de la Liga) y Banfield (ganador de la final entre el perdedor de la zona campeonato con el ganador de la zona complementación de la Copa Diego Maradona) tienen asegurada una plaza. El Sabalero ya está confirmado para la Libertadores, mientras que el Taladro ya tiene su cupo en la Sudamericana. Para el resto de los lugares está la tabla anual, que en el primer semestre del 2021 fue mirada de reojo pero que en la segunda mitad del año será clave.