La sampedrina Brenda Rojas, de 25 años, reconoció que necesita "más fogueo entrenando con las mejores del mundo", tras terminar última en la semifinal número 4 de K1 500 metros de canotaje que marcó su despedida de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.

"Tomo lo hecho ayer cuando clasifiqué para esta semifinal y que hoy di todo, porque no me quiero ir amargada de estos Juegos Olímpicos que fueron fantásticos para mi", le manifestó Rojas a la transmisión oficial de la competencia.

"Sé que estoy compitiendo con las mejores del mundo y entonces tengo que trabajar más todavía para poder estar a su altura. Pero me voy mucho más contenta de competir en 500 metros que en 200 (estuvo cerca de acceder a semifinales también), y haberlo hecho en buena forma me hace sentir bien", confió.

La kayakista de la Escuela de Canotaje Cooperativa Las Canaletas, de la ciudad bonaerense de San Pedro, nacida el 15 de octubre de 1995 en esa ciudad, también se mostró orgullosa de haber competido en la misma instancia que la ganadora de la semifinal de hoy, la bicampeona olímpica (fue oro en Londres 2012 y Río de Janeiro 2016) Lisa Carrington.

"Fue un lujo estar en la misma serie que la neocelandesa Carrington, porque es un fenómeno", expresó con inocultable orgullo Rojas.

"Por eso, lo que necesito ahora es tener más fogueo en competencias con las mejores para seguir creciendo. Acá tuve la oportunidad de entrenar con la portuguesa Teresa Portela y parece estar a otro ritmo. Eso me asombró, porque yo terminaba reventada y ella seguía como si nada", remarcó.

Y concluyó que "saber que hay gente que trabaja así es una experiencia fantástica. Y además es muy gratificante que se abran así a una, para pasarte sus experiencias y conocimientos", destacó finalmente la última representante argentina en canotaje de estos Juegos Olímpicos.