Uno de los grandes problemas que trajo la pandemia fueron los problemas vinculados a la salud mental. Según los especialistas aumentaron los casos de ansiedad, de angustia y de depresión.  Ese fue el panorama de la Tota Santillán que ante la incertidumbre laboral, mas la pérdida de un ser querido, sufrió un cuadro grave de depresión que necesitó un tratamiento adecuado.

Esta fue la razón por la cual el conductor decidió internarse por propia voluntad en una Clínica para recibir asistencia y hoy, casi un mes después de esa decisión, tuvo el alta médica.

La Tota volvió a su casa aunque tendrá que seguir con un tratamiento ambulatorio para evitar recaídas. Es la tercera vez que el referente de la movida tropical se hospitaliza por voluntad propia. Años atrás sufrió de un brote psicótico que lo llevó a un intento de suicidio.

"Me acaban de confirmar el alta de la Tota Santillán a casi un mes de su internación. Ya se encuentra en su casa recuperándose. Se había puesto depresivo cuando se murió un amigo de casi toda la vida por coronavirus. Nunca tuvo brote psicótico”, dijo el periodista Juan Etchegoyen