Según Hardvard, estos son los tres peores alimentos para el corazón
De acuerdo a una nueva investigación, se debería evitar o consumir en menor cantidad.
Los alimentos son parte de la respuesta de cómo tener un corazón sano. Con tan sólo mejorar la dieta es posible reducir los riesgos de enfermedad cardiaca. Para ello es importante reconocer cuáles perjudican el corazón y cuáles deberíamos eliminar completamente.
La Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard publicó hace un tiempo un artículo con los tres que debemos evitar para tener un corazón sano, ayudar a reducir el colesterol alto, la presión arterial y los niveles de azúcar en sangre e insulina, así como prevenir la obesidad y mejorar la función del corazón y vasos sanguíneos.
Carne procesada
Es preferible no comerla o, como máximo, dos porciones por semana. Son las que se conservan con sales, nitritos u otros conservantes. Incluyen tocino, salchichas, salame y otras carnes frías, como jamón y mortadela. Es probable que los altos niveles de sal y conservantes que tienen sean parte del problema.
Cereales refinados
Estamos hablando de pan blanco, arroz blanco, cereales para el desayuno bajos en fibra, dulces y azúcares y otros carbohidratos refinados o procesados. Los altos niveles de procesamiento eliminan muchos de los componentes más saludables, como la fibra dietética, los minerales, los fitoquímicos y los ácidos grasos.
Los altos niveles de procesamiento destruyen la estructura natural de los alimentos. El procesamiento a menudo agrega muchos ingredientes que son menos saludables, particularmente grasas trans, sodio y azúcares.
Algunas investigaciones muestran que la fructosa se metaboliza de manera diferente a otros azúcares, de una manera que aumenta la producción de grasa nueva por parte del hígado. En cambio, los cereales integrales reducen la presión arterial y el colesterol, y pueden mejorar la función de los vasos sanguíneos y reducir el hambre.
Refrescos y bebidas azucaras
Una lata de gaseosa contiene el equivalente a 10 cucharaditas de azúcar de mesa, y los refrescos dietéticos, si bien no tienen azúcar, no nutren. Las bebidas azucaradas tienen los mismos efectos nocivos sobre el corazón que los carbohidratos altamente refinados y procesados, aportan muchas calorías y aumentan las posibilidades de aumentar de peso.