Michael Masi ha admitido que los comisarios tomaron la decisión sobre Max Verstappen sin tener acceso a más imágenes que las de la retransmisión. El director de carrera admite que las onboards y las cámaras 360º pueden dejar en evidencia un movimiento sucio por parte de Max.

El piloto de Red Bull frenó tarde en el interior y se salió de la pista y obligó a Hamilton a evitarle para que no se produjera un toque entre ambos. A pesar de que el incidente se anotó, la FIA no consideró necesaria su investigación, una decisión controvertida.

Masi ha confirmado que la FIA no tenía acceso a más imágenes que las que se mostraron durante la retransmisión cuando se tomó la decisión durante la carrera. El incidente no llegó a debatirse por los comisarios porque la Federación no consideró necesario investigarlo.

"No tuvimos acceso a las onboards, miramos sólo las cámaras de la retransmisión, como he dicho antes, que es básicamente a lo que tenemos acceso", ha comentado Masi en declaraciones al portal web estadounidense Motorsport.com.

El director de carrera explica que todas esas imágenes suelen estar disponibles sólo tras la carrera.

"Los puntos de visto opuestos, los 360... hay muchos ángulos de cámara que no tenemos en directo que se descargarán y los miraremos tras la carrera. No se han obtenido todavía. Se han solicitado", ha añadido Masi.

A pesar de que descartaran la investigación, Masi admite que las imágenes de las onboards y de las cámaras 360º pueden ser un cuchillo ensangrentado si muestran, por ejemplo, a Max girando el coche hacia Hamilton. 

"Podría ser, 100%. Posiblemente. Pero no, no tuvimos acceso a esos ángulos y obviamente se están descargando. Una vez que el propietario de los derechos los proporcione, los miraremos", ha expresado Masi para cerrar.