Graves incidentes frente a la comisaría tras el asesinato del adolescente
La manifestación había comenzado a las 17 en la plaza céntrica. Corridas e insultos hacia la policía.
Si bien se había convocado a la marcha a partir de las 17, media hora antes los vecinos comenzaron a concentrarse en inmediaciones de la plaza céntrica de Miramar.
Con aplausos incesantes, que se prolongaron por más de 10 minutos, familiares y amigos de la víctima exhibieron una gran pancarta con la leyenda “Justicia por Luciano Olivera. Basta de gatillo fácil”.
Con el correr de los minutos y sin dejar de aplaudir, comenzaron los gritos de “asesinos” e insultos de todo tipo a la Policía.
“Era el nieto del corazón desde los cuatro años, era muy compañero, yo tengo una distribuidora y era mi ayudante, siempre estaba conmigo para todos lados. Es algo muy triste”, dijo a la agencia Télam Carlos Benavídez, abuelo de la víctima.
El hombre aseguró que el policía Maximiliano González conocía a Luciano porque “vive a dos cuadras” y que ayer en su cumpleaños usó el patrullero para ir a su casa a festejar.
“Llegó a la noche en el móvil y lo subió a la vereda de la casa, después salió con el móvil de vuelta a seguir trabajando”, sostuvo Carlos, y añadió: “No tengo explicación porque en la filmación se vio que le tiró a matar”.
Además, el abuelo descartó que se le haya escapado el disparo como según dio su versión el efectivo González.
Por último, el hombre indicó que a su nieto era una persona “excelente” al que le “le encantaba el fútbol” y al que lo había ido a ver a jugar a Mar del Plata con su madre.
Los manifestantes continuaron la movilización desde la plaza principal hasta unas siete cuadras al llegar a la peatonal y la costa, mientras que unos 50 policías de infantería estaban apostados en la comisaría para resguardar el lugar, del que también fueron retirados todos los patrulleros por prevención.