"Tengo muchas ganas de ver cómo se siente el coche en la vida real. Todavía no lo sabemos, pero estoy deseando salir del pitlane y dar las primeras vueltas", dijo el campeón del mundo reinante en el evento de presentación de Red Bull.

Verstappen ya tiene una idea de lo que le espera, en parte basada en el trabajo del simulador y expresó cual es su mayor preocupación.

"La visión desde el habitáculo será el mayor cambio debido a estos enormes neumáticos", señaló debido al cambio a llantas de 18 pulgadas.

"Será un poco más difícil llegar al vértice en ciertas curvas. También se siente que el coche en su conjunto tiene menos agarre que el del año pasado, pero nos acostumbraremos a ello. Para eso están los días de prueba. Podemos acostumbrarnos a deslizarnos, bloquear y todo eso. Al final eso debería funcionar bien. Lo principal es realmente acostumbrarse a la visión diferente".

Las jornadas de pruebas a las que se refiere Verstappen comenzarán el 23 de febrero en Barcelona. Antes de eso, Red Bull tendrá la oportunidad de hacer su propio shakedown. Cada equipo dispone de dos días de filmación al año, durante los cuales puede cubrir 100 kilómetros con neumáticos especiales de demostración.