Las exportaciones uruguayas hacia la Argentina siguen sin encontrar un canal libre y las trabas, formales o informales, generan preocupación en las autoridades locales, al punto de considerar que está en riesgo la continuidad de una importante fábrica de automóviles, Chery.

Desde hace 60 días que la automotriz no puede hacer entrar sus vehículos a la Argentina, debido a la demora en la autorización de las licencias no automáticas que aplica el país cuyo plazo ya excedió el máximo permitido de días.

Pero mientras el gobierno de José Mujica confía en la promesa de la presidente Cristina Kirchner sobre la reapertura del flujo comercial, los empresarios locales mantienen preocupación y sostienen que, en muchos casos, no hay avances en el levantamiento de trabas.

La automotriz Chery Socma (del grupo Macri) informó que ya perdió un negocio por 1,5 millones de dólares. Daniel Villamarín , director de logística y vocero de la firma, dijo al diario El País de Montevideo que su empresa "está siendo castigada" por una demora en el ingreso de mercadería ya "comprometida" con proveedores de la Argentina.

El ejecutivo indicó que la automotriz perdió una licitación en la provincia del Chaco para colocar 110 unidades. "En la Argentina montamos una red de concesionarios y servicios, y ahora nos encontramos con clientes que nos están pidiendo que les devolvamos las señas porque no les entregamos los autos a tiempo", explicó Villamarín.

Según se informa en la prensa uruguaya, en las próximas horas se reunirán el director Nacional de Industrias, Sebastián Torres, con el subsecretario de Industria de la Argentina, Eduardo Bianchi, para analizar los productos uruguayos que tienen dificultades.

En este marco, el diario La República, fue más allá y asegura en un articulo publicado que la firma Chery Socma puede llegar a abandonar el pais a raiz de las trabas.