Alwa, la primera rapera aymara

La joven de 26 años nacida en la ciudad de El Alto (Bolivia), primera mujer indígena que surge en este género, ya produjo su primer video musical y estima que a mediados de año podría estar sacando su primer disco.

Alwa, la primera rapera aymara, presentó su primer video musical "Principio sin fin", donde acompaña sus letras a las que ella define como "una música rebelde", con instrumentos andinos tradicionales como la zampoña y el charango.

"En mis letras expreso mi sentir de las cosas, mi opinión de la situación en la que estamos viviendo ahora, todos hemos sufrido injusticia", dijo a AFP Alwa, que prefiere no dar su nombre completo. "Creo que el rap parte de eso, de sentir esa rebeldía, de rebelarse contra algo que no se está de acuerdo, pero tiene que ser algo lógico", agregó.



A poco de su reciente debut en un escenario, Alwa -"Amanecer" en lengua aymara- dio su segundo concierto en una feria de libros en el atrio de la principal universidad estatal de La Paz.

La primera mujer indígena que surge en este género musical, ya produjo su primer video musical: "Principio sin fin", y estima que a mediados de año podría estar sacando su primer disco.

"No me importa si la gente se alborota con mi música / Sólo díganle a mi mamá que el miedo no me va a parar / No me va a poder ganar / Díganle también que yo viviré de rap/", recita en los primeros versos de la canción, que arranca con zampoñas, el típico instrumento andino de viento.

La joven de 26 años nacida en la ciudad de El Alto, vecina de La Paz, y criada en una familia tradicional y sin músicos en su entorno, actualmente estudia publicidad y marketing en la universidad, aunque aseguró que su sueño desde pequeña era cantar. "Mi sueño ha sido cantar, desde que era pequeña me gustaba cantar", expresó.

La cantante, a pesar de que a su madre "no le gusta" el rap y que su padre quiere que continúe con la carrera universitaria, sentenció: "Lo que yo realmente quiero ahora es hacer música".

La joven de 26 años nacida en la ciudad de El Alto, vecina de La Paz, y criada en una familia tradicional y sin músicos en su entorno, actualmente estudia publicidad y marketing en la universidad.