El fiscal Marcelo Pecci, de 45 años e integrante de la Unidad Especializada de Lucha contra el Crimen Organizado y el Narcotráfico de Paraguay, fue asesinado ayer a balazos en las playas de la isla Barú, Colombia, donde pasaba su luna de miel, tras haberse casado el 30 de abril último con Claudia Aguilera, una reconocida periodista. Horas antes del crimen, la pareja había anunciado que esperaba su primer hijo.

Durante su carrera, Pecci, especializado en crimen organizado, investigó casos de narcotráfico, lavado de dinero y financiamiento del terrorismo.

Pecci participaba de dos de las investigaciones con mayor repercusión mediática en Paraguay: una denominada " A ultranza Py", con cien allanamientos en febrero, más de 40 detenciones y bienes incautados por unos 100 millones de dólares, producto del tráfico de cocaína a Europa.

La segunda era por crímenes atribuidos al narcotráfico durante un recital musical en enero en San Bernardino, cerca de Asunción.

Su carrera en el Ministerio Público había iniciado en el 2000 y se desempeñaba como fiscal en Paraguay desde 2009.

En 2020 habia ganado fama por estar a cargo del caso en contra del futbolista Ronaldinho, quien había intentado ingresar a Paraguay con documentos falsos.

Entre otros casos famosos, se había encargado de documentar el asesinato de la hija del gobernador de Amambay, Kaline Reionoso de Oliveira, de 22 años; e investigó al clan Sánchez Garcete por lavado de dinero, informó AS.