En la tarde-noche del sábado se conoció que se llevó a cabo una requisa en la Seccional 11 de la ciudad de Santa Fe. La misma dependencia policial que la semana pasada quedó en medio de una polémica cuando una denuncia anónima alertó sobre incumplimiento de funciones por parte de los oficiales que otorgaban permisos especiales a los detenidos.

Las labores comenzaron al mediodía, solicitada por los propios oficiales a cargo de la Comisaría y contó con la participación de un grupo de CGI que trasladó a los 47 alojados a disposición de Tramites y Libertades URI, al patio de la comisaría donde quedaron en custodia del personal de la Agrupación Cuerpo.

En tanto, el personal policial procedió a la requisa del penal y verificación de las instalaciones edilicias finalizando con el secuestro de 7 teléfonos celulares de distintos modelos, 4 auriculares, 4 cargadores, y una chuza de madera con punta metálica.

Todo fue hallado en la zona del garaje de esta dependencia, guardados en una bolsa de color marrón y sostenido por un gancho de fabricación casera de alambre, ubicado sobre un ventiluz proveniente de las celdas de los internos civiles.

El fiscal en turno, Eric Fernández dispuso que se le de intervención a Asuntos Internos.