"Hambre de paz social y la patria herida", las crudas definiciones de la Iglesia
En un Tedeum que no contó con la presencia de Alberto Fernández, el arzobispo tucumano Carlos Sánchez llamó a la dirigencia política a asumir "el compromiso responsable de trabajar unidos por el bien común".
Sin la presencia del presidente Alberto Fernández en la Catedral de San Miguel de Tucumán, la Iglesia realizó el tradicional Tedeum por el Día de la Independencia y advirtió que la Patria "está herida", al tiempo que remarcó que "hay hambre de paz social".
El mandatario viajó a la ciudad norteña para encabezar el acto oficial en la Casa Histórica por el aniversario número 206 de la Declaración de la Independencia, pero optó por no asistir a la ceremonia religiosa encabezada por el arzobispo de Tucumán, Carlos Sánchez.
En su homilía, el monseñor llamó a "reconstruir" la Patria, que, según su diagnóstico, "está herida". "Hoy nuestra Patria es un pueblo hambriento, desconcertado, preocupado, herido", advirtió el prelado.
Con similitudes en lo expresado por el arzobispo porteño, Mario Poli, durante el Tedeum del 25 de Mayo pasado, Sánchez subrayó que "en muchas familias falta el pan cotidiano y el trabajo digno", así como se quejó de que "ha crecido la pobreza".
"Hay hambre de justicia y dignidad, de respeto y cuidado de la vida en todas sus etapas. Hay hambre de paz social, de respeto a la Constitución y de democracia auténtica", remarcó el arzobispo de Tucumán.
Y continuó: "Hay hambre de verdad, de una educación que ponga en primer lugar a la persona humana, que no imponga ideologías, que conduzca a pensar y realizarse dignamente. Hay hambre de confianza y trabajo mancomunado entre todos por el bien de todos".
Ante este duro análisis de la realidad argentina, el monseñor envió un mensaje al conjunto de la dirigencia política: "Asumamos el compromiso responsable de trabajar unidos por el bien común, todos los ciudadanos, madurando en los distintos valores morales que llevan a un desarrollo humano integral. Salgamos de nosotros mismos y de nuestros propios intereses. Digamos sí a la cercanía y no al aislamiento, sí a la cultura del encuentro, no a la cultura del enfrentamiento".
Pese a la ausencia de Alberto Fernández, sí hubo representación del Gobierno nacional en la Catedral de San Miguel de Tucumán: estuvieron presentes el jefe de Gabinete, Juan Manzur; el vicejefe de Gabinete, Jorge Neme; y el ministro de Cultura de la Nación, Tristán Bauer.
También concurrieron a la ceremonia religiosa el gobernador, Osvaldo Jaldo; las diputadas nacionales Rossana Chahla y Victoria Tolosa Paz; y las senadoras nacionales Sandra Mendoza y Beatriz Ávila.