Jorgelina Aruzzi se suma a la versión teatral de "Casados con hijos"
Tras la escandalosa salida de Érica Rivas, el elenco de la popular sitcom suma un nuevo papel.
A varios meses de la confirmación de la temporada teatral de Casados con hijos para el verano de 2023, se definió quién será la nueva figura femenina que se incorporará al elenco compuesto por Florencia Peña, Guillermo Francella, Marcelo De Bellis y los hermanos Luisana y Darío Lopilato.
Tras la escandalosa salida de Érica Rivas, quien le dio vida a María Elena Fuseneco, la elegida por los productores, que llevarán la adaptación al teatro Gran Rex a partir del 5 de enero, es Jorgelina Aruzzi. La actriz, que viene de lucirse en la novela El primero de nosotros, no será el reemplazo directo de su colega, sino que interpretará a un nuevo personaje llamado Azucena, quien será la nueva conquista amorosa de Dardo (De Bellis).
Cabe recordar que cuando se anunció el proyecto y salieron las entradas a la venta en 2019, se agotaron en cuestión de horas. Pero la pandemia del coronavirus obligó a los teatros a cerrar sus puertas y suspender todas las funciones. Recién en abril de 2020 se anunció que el estreno programado inicialmente para las vacaciones de invierno pasaría a ser en enero de 2021, luego para junio y finalmente se canceló.
En un principio, Rivas había sido confirmada para la obra e incluso su imagen formaba parte de la marquesina. Sin embargo, luego de la primera suspensión, comenzaron los problemas y aunque se dijo que había renunciado, salió a desmentirlo en una entrevista con Página/12. "Quiero que quede claro, yo no me fui, yo quería hacer ese proyecto, a mí me echaron. Me sacaron de las fotos de promoción, de la marquesina del teatro que ya estaba lista. Y lo hicieron por WhatsApp a la vez que hacían público un mail privado", declaró en referencia a los mensajes que salieron a la luz, en los que criticaba el guion por tener contenido machista.
Y apuntó contra sus excompañeros de trabajo: "Mirá lo que es el pacto de hombres, porque se lo mandé a hombres –los productores, los guionistas (Axel Kuschevatzky y Diego Alarcón) y el director (Guillermo Francella, también protagonista) eran todos hombres- después de haber hablado con todos y cada uno. Y eso no fue dicho. No tenía ningún aliado".
Además, aseguró que Francella la trató de "feminazi". "Me comí que el director me dijera feminazi, que estaba demasiado alterada. Y mi transpiración llegaba desde el cuello a los pies. Me decían, bueno, no te preocupes que nos ponemos el pañuelo. Pero es mucho más que eso", explicó la artista. Y dio detalles de su reacción: "Lo que me salió fue decir: 'Mirá, estás equivocado. Yo te aconsejo que no lo digas nunca más. Esta palabra no la digas nunca más'. Eran reuniones con peces gordos. Producción, dirección, algunos diciéndome sí, tenés razón, claro. Y después me llega ese guión donde el único chiste es que una mujer no se depila".
También reconoció que el tono de sus mails era agresivo, pero que su objetivo era contar con una asesoría para mantener la esencia de su personaje, María Elena Fuseneco, sin desentonar con el contexto social.