Guillermo Vilas fue un artista dentro de una cancha de tenis. Cada punto era parte de un gran poema. Y el sonido que salía de su raqueta cada vez que acariciaba una pelotita imitaba a una nota musical, creando así grandes canciones como los inolvidables triunfos a Brian Gottfried (final de Roland Garros 1977) y Jimmy Connors (US Open 1977). Pero basta de analogías, porque podemos hablar con hechos reales del costado artístico del mejor tenista argentino de todos los tiempos. Durante sus días como profesional, entre partido y partido, Vilas incursionó como cantante y escritor de poesías. ¿Qué tal?

Vilas y su etapa como escritor de poesías

Guillermo Vilas, además de convertirse en una referencia ineludible para quienes empuñan una raqueta, también desarrolló una carrera artística en paralelo. Antes de llegar a lo más alto del tenis mundial, con 23 años publicó su primer libro de poesía llamado "125", de Editorial J. R. Corvalán y asoc. Este tuvo una venta aceptable pero sin el acompañamiento de la crítica profesional.

Durante esos años, el zurdo marplatense se erigió como uno de los mejores tenistas del mundo. Entre 1974 y 1977 consiguió los títulos más importantes de su carrera: desde las ATP Finals hasta el Roland Garros y US Open del '77. Entre campeonato y campeonato, en 1976 publicó un nuevo libro: "Quién soy y cómo juego", casi una autobiografía de la mano de Editorial El Gráfico. Este vendió más de 20 mil unidades el día de su lanzamiento y superó los 400 mil ejemplares.

A los 29, la editorial Galerna publicó un nuevo libro de poesías llamado "Cosecha de cuatro", cuyo prólogo fue escrito nada menos que por Luis Alberto Spinetta. Ambos crearon un cercano vínculo: Willy es el padrino de Dante Spinetta y en más de una oportunidad señaló al Flaco como su ídolo.

Vilas grabó tres discos como cantante

En 1978, Guillermo Vilas ayudó al Flaco Spinetta a editar en inglés el disco "Only love can sustain" (Solo el amor puede sostener), de 1978, en un intento por ingresar al mercado anglosajón. Pero la colaboración no quedó ahí: el tema "Children of the bells" fue compuesto por ambos.

Ya retirado del tenis, en los '90 Vilas explotó al máximo su amor por la música, especialmente por el rock. Willy grabó tres discos como solista: "Milnuevenoventa" (1990), "Dr. Silva" (1992) y "Guillermo Vilas" (1998). Sin un gran éxito en el ambiente, así cerró su incursión como cantante. ¿Lo tenías?