Los resultados de los estudios complementarios de las autopsias a dos de los cincos bebés muertos a poco de nacer en el Hospital Materno Neonatal Ramón Carrillo, de Córdoba, confirmaron lo que las familias habían denunciado: los niños perdieron la vida como consecuencia de "exceso de potasio", sustancia que fue "inyectada de manera intencional".

La información, publicada por la agencia Télam y medios locales como ElDoce, fue confirmada por fuentes vinculadas a la causa, en la que hay una enfermera detenida e imputada por homicidio calificado reiterado.
Según se consignó, el informe de la autopsia detalla que "se detectaron sustancias tóxicas incompatibles con la vida".

Los datos forenses corresponden a dos de los cuerpos de bebés fallecidos, del total de cinco casos que investiga el fiscal Raúl Garzón. Se trata de los fallecidos el 6 de junio, que desencadenaron la investigación de otros casos similares.

El fiscal Garzón había manifestado que "la enfermera se la detiene por dos hechos, que son los que al día de la fecha se ha podido avanzar en los estudios complementarios de las autopsias de dos de los niñitos fallecidos".

"Obviamente que es una instancia preliminar, falta complementar sobre los otros hechos", aseveró y precisó que si bien la investigación inicial se dio sobre cinco bebés muertos, en total son 13 los casos que se estudian, entre los fallecidos y otros que sufrieron serias consecuencias y sobrevivieron, había manifestado luego de la detención.