Desde el 2020 todas las esferas de la vida se transfirieron a la digitalidad y la delincuencia no quedó fuera de este hecho, aunque las ciberestafas ya venían en funcionamiento años antes. Las estafas virtuales se duplicaron en el país con respecto año 2020 y de acuerdo al informe de Cert.ar, el 39,7% de los incidentes reportados fueron sobre sitios del Estado.

Hoy cada vez son más las organizaciones criminales que entienden el valor de los datos de los perfiles en internet y los usan para realizar estafas virtuales. Los datos salen de todas partes, desde tarjetas de crédito, locales y hasta redes sociales y WhatsApp. Por lo que nadie está totalmente a salvo de las ciberestafas y la única forma de combatirlo, más allá de la investigación policial, es la prevención y generar conciencia de la cibercultura para protegerse.

Cómo funcionan las organizaciones criminales virtuales

Para prevenirse de las ciberestafas es muy importante entender cómo funcionan estas organizaciones criminales que roban datos para realizar estafas. Estos delincuentes pueden robar datos simples de nuestras redes sociales y llegar a robarnos una gran cantidad de dinero.

Estos estafadores pueden captar víctimas a través de WhatsApp, Facebook, Instagram, Twitter o Tinder, por nombrar las redes sociales más populares por donde roban datos. 

Cuando recibimos un mensaje de este tipo de ciberestafas no estamos hablando con un estafador, sino que se trata de organizaciones criminales complejas que cuanto más se indaga más profundo se llega. Son redes inconmensurables. Estos estafadores pueden presentarse de diferentes formas: puede ser a través de un beneficio, diciendo que ganaste algo, a través de un turno de vacunación o inventando una historia para que la víctima le transfiera dinero.

Consejos para evitar caer en ciberestafas

1- Revisa el nombre de los correos electrónicos recibidos

Cada vez que recibas un correo electrónico de un remitente desconocido, es importante que busques el dominio del que proviene. Para esto, debes fijarte en lo que se encuentra después del símbolo “@” (arroba). Por ejemplo, si el remitente es cperez@seguridad.com.ar, el dominio es “seguridad.com.ar”.

Existen varios lugares donde puedes encontrar información. Lo mejor es utilizar proveedores de dominios como Hostinger, para poner un ejemplo. En este tipo de plataformas, además de la posibilidad de registrar un dominio, vas a encontrar información sobre los dominios que ya tienen propietarios.

2- No pases información personal ni financiera a través de mensajerías privadas

Las empresas, en la actualidad, se han adaptado a la forma y los medios de comunicarse que tienen los consumidores. Es por esto que se toma como natural o cotidiano que los diversos negocios escriban por plataformas de mensajería instantánea, como WhatsApp.

A pesar de que existen formas que aseguran que la cuenta sea verdadera, siempre debes tener cuidado. No pases información personal ni financiera por estos medios. En estos casos, lo mejor que puedes hacer es comunicarte directamente con la empresa para corroborar que la comunicación sea real.

3- No hacer clic en enlaces de emisores desconocidos

En este último tiempo, las estafas virtuales a través de links se hicieron muy populares. Estos links pueden llevarnos a descargar un malware, a una página que contenga un virus o al acceso de alguna cuenta personal, por nombrar solo algunos ejemplos. Nunca se sabe a dónde nos puede llevar un enlace, por lo que es mejor que no entremos cuando el remitente sea desconocido.

4- Usa contraseñas seguras que no sean fáciles de descifrar

Algunos sitios fomentan el uso de contraseñas seguras dado que, a medida que el usuario escribe la clave, va midiendo el grado de seguridad y se lo comunica a la persona de alguna manera, por si quiere mejorar su clave. Pero, la gran mayoría de las web no realizan este tipo de acción. Por lo que el usuario es quien debe preocuparse por tener una clave que realmente sea útil.

5- Usar doble método de autenticación en redes sociales

Las redes sociales, sobre todo aquellas que cuentan con una gran cantidad de seguidores, están siendo un objetivo claro para los estafadores.

Para proteger tus redes sociales, es importante que uses doble método de autenticación. Consiste básicamente en que cuando quieras ingresar a tu Facebook, Instagram, Gmail o alguna otra plataforma, además de la contraseña te van a pedir que confirmes que eres tu identidad con otro método. Por lo general, como medio de autenticación secundario, se usa el número de teléfono o un correo electrónico secundario.

6- Si te contactan de alguna entidad conocida llama por teléfono para confirmarlo

Los estafadores virtuales realizan estafas desde el anonimato. Es probable que, además de recibir correos electrónicos, te envíen mensajes por mensaje de texto, WhatsApp y hasta en tus redes sociales.

Antes de avanzar con cualquier tipo de contacto que te pida información sospechosa, llama a la compañía de la que, supuestamente, se están comunicando. Esto despejará todas las dudas que se puedan generar.