Ya es un hecho. La plazoleta Alexander Fleming, ubicada entre las calles Rafael Hernández y Lidoro Quinteros, se llamará Luis Alberto Spinetta por ser "una de las figuras más influyentes de la música nacional". La ley, impulsada por el legislador Roy Cortina, fue sancionada el jueves 3 de noviembre en la Legislatura Porteña para homenajear al artista a diez años de su muerte.

El proyecto -que también conservar los canteros centrales de la plazoleta y colocar "juegos infantiles que permitan, de manera lúdica e interactiva, un acercamiento a la música y su patrimonio cultural, y placas conmemorativas sobre la figura y obra de Luis Alberto Spinetta"- contó con 52 votos a favor de Juntos por el Cambio, el Frente de Todos y el Frente de Izquierda; mientras que los diputados de La Libertad Avanza, el espacio político de Javier Milei, se opusieron.

Anteriormente, la iniciativa había sido aprobada en la primera lectura en la Legislatura Porteña, con 37 votos a favor, del bloque de JxC y del Frente de Todos,  cuatro en contra, de diputados de La Libertad Avanza. Y en septiembre pasado se celebró una audiencia pública en la que se leyó una carta escrito por Dante, Catarina, Valentino y Vera, los hijos del músico. "Nos resulta muy acertado que una plazoleta ubicada en su barrio natal pueda ser bautizada en su honor y que ese espacio pueda ser de inspiración para los vecinos que la concurran", manifestaron y expresaron su agradecimiento "por continuar honrando" el nombre de El Flaco.

Spinetta es uno de los músicos argentinos más influyentes y entre los años 60 y 70 marcó un importante cambio en la escena del rock nacional de la mano de bandas como  Almendra, Pescado Rabioso e Invisible, con la que introdujo géneros como hard rock, blues, y rock progresivo. En los 80 y 90 formó ​ En los 80 y 90 formó Spinetta Jade y Spinetta y los Socios del desierto, dos agrupaciones que también dejaron su huella y también se lució con sus discos como solista.

El 8 de febrero de 2012 falleció a los 62 años a raíz de un cáncer de pulmón y, siguiendo su voluntad, su familia espació sus cenizas en el Río de la Plata, al lado del Parque de la Memoria de Buenos Aires.