El miércoles pasado, en Rosario, el cirujano Mariano Blanco asistió en la calle a un hombre que se descompensó en la calle, mediante maniobras de RCP. Pasaron varios días y se enteró de que lo estaban buscando por Twitter para agradecerle su gesto. Y es entonces también que se anotició de que había salvado al paciente de un infarto.

“Yo iba por la calle, lo veo en la vereda de enfrente mal sentado, como al borde de caerse”, comenzó su relato por LT10. “Imaginé que tenía un golpe de calor o baja presión. Era lo más lógico. Trato de interrogarlo, me dijo difícilmente su nombre y luego su estado de conciencia se empieza a deteriorar. Lo dejo en el piso, no me responde más e inmediatamente deja de respirar, se pone cianótico y sin pulso. Es s ahí cuando empiezo las maniobras”, agregó.

“Este lunes mediante el tuit me entero de que fue un infarto y que se estaba recuperando”, contó.

Con mucha humildad, Blanco confesó que es “un poco alérgico” a salir por los medios, pero valoró la entrevista para lograr un cometido: “reivindicar el valor de conocer las maniobras de RCP”.

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