Se desmoronó una de las paredes de la distribuidora incendiada
Sucedió este lunes a las 6.30 de la mañana. Se espera que esta semana se derrumbe, de forma controlada, lo que queda del edificio.
Este lunes cerca de las 6:30 de la mañana, colapsó la pared norte de la distribuidora de barrio Don Bosco que la semana pasada fue devorada por las llamas de un gran incendio.
Según relató Luis Amsler, en el móvil de LT10, la pared que cedió es la que estaba sobre calle Estanislado Zeballos. "La pared ya se encontraba muy deteriorada, en la misma tenía una persiana muy grande que estaba en pésimas condiciones a causa del incendio", detallaron desde el lugar.
Además, detallaron que en las inmediaciones del edificio están colocando palets en forma de muralla para evitar que la gente intente ingresar al edificio en ruinas. Solicitan a los vecinos que no se acerquen al lugar, ya que hay algunos que llegan cómo curiosos y otros que intentan llevarse algunos pañales que no fueron alcanzados por las llamas de la semana pasada; y el estado del edificio reviste muchísimo peligro.
"Escuché un tremendo ruido a eso de las 6 y algo de la mañana. Parecía que una camioneta se había chocado las vallas y las había traído hasta la puerta de casa. Cuando salí a mirar estaba toda la polvareda, se había venido todo abajo. La gente pasaba y se arrimaba, por eso han puesto las tarimas esas para que no pase la gente", comentó Darío, un vecino que vive frente de la pañalera.
Se espera que esta semana se concreten las reuniones para definir fecha para coordinar las acciones para la demolición del inmueble. Según detallaron desde el municipio se planea construir una estructura para contener los escombros cuando se produzca el derrumbe final de la edificación.